La presentación de Marcos Urtubey termina con una generación fracasada. En el otro extremo Nora Giménez goza del silencio y la impunidad en los medios de comunicación, y en buena parte del arco ideológico local. Los hermanos Ruiz en la mira de los gringos.

 

Rodolfo Bayer.

Pese a la centralidad informativa que tiene el avance del Covid19 en Salta, el tablero político sigue moviéndose de cara al año entrante. Más allá de esperable renovación de la CAP justicialista, muchos encienden motores de cara al 2021. Entre ellos el que largó en punta esta semana fue el piloto Marcos Urtubey, hijo mayor del ex gobernador Juan Urtubey, y flamante joven de la política vernácula. El lanzamiento del muchacho termina de sepultar en términos de recambio, a una generación de jóvenes totalmente fracasada en el escenario salteño, como Matias Assenato, Carlos Morello o Baltazar Lara Gross.

Es evidente que Marcos arranca con ventaja frente a otros dirigentes, a los que se les fue el tren del destino. Pibes que hasta ayer supieron tener su misma juventud, pero que hoy están quemados a fuerza de panquequismo extremo, y pésimos resultados objetivos. El hijo de Juan en cambio no posee ninguna derrota electoral en sus espaldas, y cuenta con importantes recursos propios para hacer política, sin tener que pensar en el financiamiento de su instalación y campaña, además de contar con la agenda de contactos de papá, que es una de las tres más importantes de Salta. El pique en punta del joven U pone en duda el futuro prometedor de otros referentes sub40, como Lucas Godoy (a) “Luquita”, e Ignacio Jarsún (a) “Facho”, quienes también podrían convertirse en rezagados prestos a perder la vuelta.

Como se llama el partido (Libertario) y quienes son los referentes nacionales (José Luis Espert) del neourtubeicismo, poco importa por estos días, debido a que muchos posicionan a Marcos en una lista oficialista de cara al año entrante. Después de todo, hasta Pamela Caletti ya se anota en los listados de precandidatos que se evalúan en el Grand Bourg. Un detalle mas no puede ser pasado por alto: el lanzamiento público de las aspiraciones de Marcos Urtubey, si bien parece un acto espontaneo sin ninguna premeditación, se dio apenas horas después del regreso de su padre al territorio que gobernó por doce años.

 

Fuego en el cerro

Una gran deuda tiene la clase política con la población salteña: la de condenar los hechos más bajos e innecesarios que cometen sus pares, con arrebatos de gula patrimonial, sin fin, ni condena. Este es el caso de la senadora nacional Nora Giménez, protagonista de nuestra última portada. Vale decir de paso que la tapa del sábado pasado fue “viralizada” como ninguna otra por los lectores virtuales de Cuarto Poder, lo que se agradece infinitamente desde la redacción y la conducción/edición. Sin dudas “Nora la usurpadora” se trató de un artículo contundente y atrevido, para una actualidad periodística medio dormida por años de pautodependencia. No se denuncia todos los días a una senadora nacional por ocupar ilegalmente 100 mts2 de tierras fiscales, con la solvencia y la documentación a carne viva, como este medio lo hizo el sábado pasado. Tal vez por esta poco frecuente osadía informativa, todo el arco político y la gran mayoría de los colegas eligieron el cómplice silencio. Un silencio enorme. Un silencio de salvación para la usurpadora, para la senadora, para Nora, la dirigente que vivió casi cuatro décadas del Estado, sin poner ni una. Ante la portada guardaron silencio. El mismo silencio atroz que Oscar Ahumada denunció en 2008. Sin embargo -nobleza obliga- el caso de Nora y el cerro usurpado, fueron noticia allá por 2011, el mismo año que descendió riBer. En esos días el diario de Néstor Gauna no publicaba los viajes del gobernador Juan U en el lear jet de la provincia, para alentar al millo de sus amores en la segunda división, pero si se encargó de la noticia sobre un incendio forestal en el cerro 20 de febrero. Siniestro (¿?) que perjudicó terriblemente a las emisoras de radio con antenas en el lugar. Un lamentable incendio que terminaba además con buena parte de la flora y fauna protegida. Un artículo muy interesante, pese a lo sintético del reducido periódico. Si bien el incendio fue sofocado por Defensa Civil tras quemar 4 hectáreas de área protegida, el casero de la senadora fue desalojado por la policía, al ser considerado un ocupa con vicios de pirómano ambiental. El hombre en cuestión (Don Víctor F) cuidaba una casilla precaria y prendía fuego diariamente a pedido de sus patrones, Nora Giménez y marido. Lo cierto es que el casero cuidaba el ancestro de la construcción actual, motivo de nuestra última portada. Pero la senadora necesitaba además un crédito PROCREAR. De allí hasta la portada viralizada hace siete días, solo pasó tiempo. Las mañas no se perdieron nunca. Ocupación, incendio, financiamiento público, usurpación, impunidad. Qué más se puede pedir para una buena historia periodística?. Esto continuará…..

 

Silencio atroz

El silencio de los colegas en el caso “Nora la usurpadora”, es tan llamativo, que casi todos simulan no leer este medio, pero abordan temáticas de lo publicado en estas páginas rosadas y esclarecedoras a diario. En un portal opa del norte (propiedad de un diputado provincial), esta semana fue publicado un resumen de nuestro trabajo la semana pasada. Un trabajo exclusivo, sobre el saqueo a Salta Forestal por parte de los mismos privados (Ruiz) que adeudan fortunas de alto impacto social en Campo Santo, por el Ingenio San Isidro. Si bien este portal colega copió y pegó el trabajo de este medio sobre los hermanos Ruiz, nada dijo del caso Giménez, que en definitiva fue el título principal de nuestra ultima edición. Silencio total sobre la senadora nacional.

Igualmente, sobre los chicos millonarios de Rosario de la Frontera / Tucumán, adelantamos desde este despacho, que próximamente podría presentarse un pedido de investigación federal por lavado de activos. La presentación judicial en contra de los empresarios nucleados en Anta del Plata SA, se redacta en un estudio jurídico salteño, aunque se gestó en un barrio cerrado de zona norte. Para colmo, un contacto estrecho de quienes firmarían el escrito inicial, tiene teléfono directo con una oficina en USA: una oficina de la DEA. Adelantamos el dato, solo por si lo quieren publicar, y alguna vez anticiparse…