El #17A pasó, pero no fue solamente el 170° aniversario del fallecimiento del General San Martín. Fue el banderazo de Juntos por el Cambio, la movilización más importante contra el Gobierno en estos 8 meses de gestión.
El encuentro empezó de forma virtual, con un informe de la presidenta del PRO y anfitriona del encuentro por Zoom, Patricia Bullrich. Casi todos los referentes del sector se hicieron presentes, aunque por poco tiempo, la mayoría tenía “compromisos contraídos previamente”. Desde Suiza, se conectó Mauricio Macri, mas virtual que nunca. Horacio Rodríguez Larreta fue el primero en irse, justo cuando estaba hablando su líder y conductor. Se disculpó y se fue. La ex ministra fue “la oradora” del evento. Habló del derecho a manifestarse de la sociedad y de que Juntos por el Cambio tenía que expresarse a favor si quería representar los valores de los que movilizaron, que están en línea con la coalición.
Con la salida de Rodríguez Larreta la situación se tensó. María Eugenia Vidal siguió conectada pero no emitió palabra durante la hora y media que duró el encuentro. Alfredo Cornejo, presidente de la UCR, Humberto Schiavoni, senador por Misiones del PRO, y Cristian Ritondo, presidente del bloque PRO de la Cámara de Diputados, también salieron.
Maximiliano Ferraro y el cordobés Mario Negri, salieron diplomáticamente, evitando que la reunión emita un comunicado sobre la marcha, aunque sí redactaron una carta pidiéndole a Alberto Fernández que retire el proyecto de reforma de la Justicia del Congreso. “Todo cambio en el funcionamiento de las instituciones de la República, especialmente si se trata de la Justicia, requiere un amplio consenso”, comenzaba la misiva, destacando que la única vez que un bloque quiso manejarse sin consenso (reforma judicial en el gobierno de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner), fue declarada inconstitucional.
Los más avezados salieron a decir que “la unidad en la oposición no está en juego”, que “Horacio no es un hombre preparado para los conflictos”, que “los intendentes y gobernadores del espacio opositor fueron forzados a expresarse contra la movilización”. Gustavo Posse, de San Isidro, directamente dijo que los que movilizaban eran gorilas. Rodríguez Larreta, más moderado, dijo que no se iba a movilizar, pero que la expresión callejera era un derecho. La que estaba exultante con los resultados de esta idea era la “Pato”. Según ella, con esta marcha las elecciones de 2021 están ganadas.
Otro que se creyó la popularidad y batió todos los records fue Bolsonaro, aunque hoy en día muchos de sus seguidores ya fallecieron de coronavirus.