El movimiento de mujeres, feminista y de la diversidad sexual no descansa y sigue marcando, junto a otros actores, el pulso de la calle en este 2016 que empieza a terminarse.

Se llegó a decir que Ni Una Menos era una convocatoria que había nacido en redes sociales. Pero la masividad y contundencia de su reclamo demostraron muy pronto que no sólo su origen era bien material y tangible, sino que su techo como articulante de reclamos y reivindicaciones no estaba planteado.

 

Este 25 de noviembre, fecha que nació en un encuentro feminista en 1981 y luego fue incorporada por Naciones Unidas en 1999, la movilización de las mujeres volverá a irrumpir en distintos puntos del globo terráqueo y, por supuesto, también en Argentina.

Frente a Tribunales, el Ministerio de Salud y el de Trabajo, entre otros lugares, mujeres de distintas organizaciones y colectivos se reunirán para discutir y plantear sus demandas. Luego confluirán en una movilización hacia la Casa Rosada donde señalarán las responsabilidades políticas del gobierno en la situación actual que se vive respecto a las distintas formas de violencia de género.

“Las trabajadoras de la economía popular salimos otra vez a la calle a decir que la falta de reconocimiento de nuestro trabajo es violencia, que el ajuste que este gobierno está llevando adelante, que afecta de forma más profunda a las mujeres, es violencia”, expresaron desde la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP). “Para decir ‘Vivas nos queremos’ defendamos la ESI”, suman desde el Frente Popular en Defensa de la Educación Sexual Integral (ESI).

 

La expresión “violencia de género” abarca varias problemáticas. Según la ley 26.485 existen cinco tipos de violencia: Física, psicológica, sexual, económica y simbólica. Cada una tiene sus manifestaciones concretas en la vida de las mujeres. Y contra todas ellas se manifestarán las mujeres este viernes.

 

Los datos de la violencia extrema

Una mujer es asesinada cada 30 horas en nuestro país. Según el último reporte del Observatorio de Femicidios en Argentina “Adriana Marisel Zambrano”, coordinado por La Casa del Encuentro, entre el 1ro de enero y el 31 de octubre de 2016 se registraron 230 femicidios y femicidios vinculados de mujeres y niñas (según se publicó en medios de comunicación, con lo cual cabe pensar que la cifra es aún mayor).

Vale aclarar que el concepto de femicidio vinculado nombra aquellos asesinatos que se realizan para generar un dolor en la víctima -por ejemplo matando a los/as hijos/as- o bien que son perpetrados en el momento de asesinato de la mujer por estar en el lugar o quedar en la línea de fuego. Hubo además 27 femicidios vinculados de hombres y niños. El total de hijas e hijos que quedaron sin madre llega a 294. De los cuales 173 son menores de edad.

Sólo el 12% de los femicidios desde enero fueron cometidos por personas sin vínculo aparente con la víctima. En el resto de los casos priman esposos, novios y ex parejas, le siguen familiares, padres y padrastros.

 

Naciones Unidas señala las deudas del Estado

 

El comité de Naciones Unidas que monitorea el cumplimiento de la Convención de Naciones Unidas sobre la Eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer (CEDAW, por sus siglas en inglés) respondió al Estado nacional el informe presentado hace unas semanas. Además, consideró los aportes realizados por organizaciones de la sociedad civil como el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), el Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de las Mujeres (CLADEM), el Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA), el Centro de Estudios de Estado y Sociedad (CEDES) y Amnistía Internacional.

La CEDAW destacó algunas medidas positivas que se tomaron en los últimos años, como la sanción de la Ley 27.210, en noviembre de 2015, que establece la creación del cuerpo de abogadas y abogados para víctimas de violencia de género el ámbito del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación. Este fue uno de los reclamos del primer “Ni Una Menos”.

Pero a lo largo del texto, lo que resaltan son incumplimientos por parte del Estado y exigencias del organismo internacional para que la Argentina esté a la altura de garantizar el derecho a una vida libre de violencia. Bajo presupuesto, poca capacidad de coordinación de políticas públicas y falta de información resaltan como algunos de los aspectos negativos.

Un dato central: la CEDAW instó al Estado argentino a la despenalización del aborto y el cumplimiento del Protocolo nacional de atención integral a las personas con derecho a la interrupción legal del embarazo. También exigió que se garantice su cumplimiento en todo el territorio nacional.

Por otro lado, el organismo de Naciones Unidas subrayó la importancia de que se promueva la paridad entre los géneros tanto en el Congreso como en el ámbito judicial y en el Poder Ejecutivo. El Comité también solicitó que se adopten medidas para reducir la pobreza y mejorar la vida económica de las mujeres.

El comité señaló lo que el movimiento de mujeres y feminista denuncia y exige hace años: el Estado debería hacer más y mejor para que las mujeres vivan sin miedo y con pleno acceso a derechos. Así volverán a gritarlo este viernes en todo el país.

 

Fuente Julia de Titto – @julitadt Notas