Así lo señaló el  CEO y fundador de la empresa salteña que desmontó 25.000 hectáreas de bosques nativos en Salta, una superficie mayor a la de la ciudad de Buenos Aires. Desdelsur, la mayor exportadora de legumbres del país, recibirá 30 millones de dólares del BID y el Rabobank. (Libertad Flores)

El fundador y CEO de la compañía, José Macera, describió que en el mercado interno no venden “nada”, aunque sí utilizan los descartes de los productos como forraje para su negocio ganadero. Por esto, Desdelsur se ha convertido en la mayor productora y exportadora de legumbres de la Argentina, y ahora obtuvo un préstamo de US$ 30 millones por parte de BID Invest y Rabobank, el mayor banco de Holanda.

José Macera

Se trata de una línea de crédito a siete años, con una tasa Libor más 5% de interés, que será utilizada, entre otros fines, para la ampliación y modernización de sus plantas de procesamiento de legumbres y maní, además de la última etapa de un feedlot que abarcará 80.000 cabezas. Explicó que la compañía exporta 50.000 toneladas de legumbres por año, aunque, si a esa variable se le suman el maní y otros productos, el número totaliza las 70.000 toneladas. La facturación anual fue de US$ 70 millones en 2018.

La empresa, con sede en Salta, produce en más de 28.000 hectáreas agrícolas. Fundada en el año 1987 por José M. Macera, exgerente comercial de la Junta Nacional de Granos, con la idea de aprovechar la apertura del mercado mexicano de poroto. A lo largo de los años fue incorporando otros negocios y activos hasta convertirse en la principal exportadora de legumbres de la Argentina.

Desdelsur señala que posee 56.000 hectáreas propias, de las cuales 28.000 están en producción, un desarrollo ganadero integrado que prevé para el año 2021 ventas anuales por casi 80.000 cabezas, una moderna planta de procesamiento de legumbres en Gral. Mosconi, una planta de procesamiento de maní en Tartagal y un centro logístico de almacenaje en Zárate, Provincia de Buenos Aires (a 1,5 km del puerto).

Desmontando historia

En una entrevista de 2012 el CEO Macera había señalado: “se puede decir que nosotros con el desmonte tenemos un orgullo gay”; y al tratar de explicar sus declaraciones mencionó:

“Es que en un primer momento, al desmontar nos escondíamos y ahora, en cambio, salimos a decirlo abiertamente, porque estamos orgullosos de haber desmontado racionalmente, sin afectar el medio ambiente y generado el desarrollo de esta región».

Recordemos que General Mosconi fue el centro del desempleo en el estallido de la crisis de 2001. Sin desmonte no tendríamos nada, no existirían empresas como el ingenio Ledesma o el azúcar en la Argentina», afirma Macera.

Macera fue más allá al tratar de justificar sus negocios y mintió: “En una de las audiencias públicas que tuvimos para la autorización de nuevas ampliaciones de tierras para desmonte, ante más de 400 personas de todos los sectores de la comunidad recibimos un respaldo unánime. Hasta el representante de Greenpeace opinó favorablemente y dijo: ‘Ojalá todas las empresas lo hagan de la misma manera’ «.

No hay nada más irracional que un desmonte

Greenpeace tuvo que responder a las declaraciones mentirosas de la empresa: “Greenpeace siempre denunció los desmontes, incluso los de la empresa Desdelsur”, describieron en aquel entonces y agregaron: Greenpeace rechaza rotundamente que apoye a este u otro desmonte. Desde hace más de 15 años la organización lucha en nuestro país para frenar la deforestación. Incluso nuestros activistas fueron arrestados en agosto de 2004 por ingresar a la finca de la empresa Desdelsur a documentar un desmonte.

En la nota se destaca el supuesto “desmonte racional” que realizó la empresa. “Queremos señalar que tal cosa resulta imposible, ya que no hay nada más irracional que desmontar. El desmonte destruye toda la biodiversidad y hace prácticamente irrecuperable al bosque; además contribuye al cambio climático, a la erosión de los suelos y a las inundaciones. En ese sentido, resulta cínico que hable de desmonte racional una empresa que desmontó 25.000 hectáreas de bosques nativos, una superficie mayor a la de la ciudad de Buenos Aires”, describieron.

Greenpeace denunció en 2014 la detención de los integrantes y activistas de la organización que fueron arrestados cuando realizaban un operativo de inspección de desmontes en el sur de Tartagal, ante la injustificada demora en disponer la liberación de los ambientalistas: nueve integrantes de la organización ambientalista fueron arrestados.

Los activistas de Greenpeace llevaban a cabo bloqueos de topadoras en el monte salteño, en particular en la región aledaña a la Reserva de General Pizarro, que el entonces gobernador Juan Romero desafectó para vender a productores agropecuarios.

El progreso fue un fracaso

En numerosas oportunidades desde la empresa señalaron al desmonte y la producción agropecuaria como único camino al “desarrollo” de la región chaqueña.

Con la excusa del “progreso”, en los últimos 15 años el avance de la frontera agropecuaria destruyó cerca de 3 millones de hectáreas de bosques nativos y obligó a muchos campesinos e indígenas a dejar sus lugares de origen y trasladarse a las ciudades, engrosando los cordones de pobreza.

El fundador y CEO de la compañía, José Macera describió que son “la principal referencia de la comunidad wichi”. En función a querer justificar este supuesto progreso señaló que la empresa vendría a suplir la ausencia estatal: “Nos hacemos cargo de sus necesidades básicas, porque lo entendemos como una parte de nuestro negocio. Les aseguramos el agua, el transporte, proveemos ambulancias, asistimos a escuelas de 500 chicos y en campañas de vacunación. En la región de Tartagal y General Mosconi somos el principal empleador privado: en forma directa empleamos a 280 personas, que en momentos de la cosecha de poroto llegan hasta los 900 trabajadores”.

Según señaló Macera, parte del compromiso social de la firma se lleva adelante a través de su fundación “El Fortín”, donde canalizan diversas iniciativas de apoyo a la comunidad aborigen de la zona. En 2015 inauguró, en uno de sus establecimientos, el primer centro CONIN para ayudar a los pueblos originarios. Según la información de la web de la Fundación, la única fuente de sustentación de sus actividades son los aportes percibidos por cuotas sociales mensuales aportadas por cada uno de los “adherentes”.

Feedlot nuevo

Los 30 millones de dólares que recibirá ahora del BID y el Rabobank serán para un nuevo feedlot en Tartagal. Según en palabras de su propio dueño lo novedoso del sistema de engorde que utilizan es cuando entran los terneros al corral. “El animal está bajo un sistema de alimentación restringida que permite que esté 350 días encerrado, sin engrasamiento. Encontramos un modelo distinto de engorde, disruptivo en la forma de hacer kilos de carne”, indicó Macera. 

Pese a las numerosas críticas que durante los últimos años viene recibiendo la mayor exportadora de legumbres del país en función al impacto ambiental producido en la zona, desde la empresa aseguran que Desdelsur hay “gran respeto por el cumplimiento de las normas y seguimiento de las recomendaciones de sus asesores ambientales en la materia”.