Tras detectarse el primer caso de dengue hemorrágico en Cerrillos se analiza si hay circulación autóctona del virus en el departamento. Las consecuencias de un municipio echado al abandono y el papel de la intendenta Yolanda Vega.  (Por Nicolás Bignante)

 

En el municipio comandado por Yolanda Vega, un docente fue diagnosticado con dengue hemorrágico en el hospital Santa Teresita y podría tratarse del primer caso autóctono en el departamento. Días atrás, un caso detectado en Pinares derivó en el bloqueo epidemiológico de la zona. De esta manera, el pueblo que supo inspirar a poetas como Abel Mónico Saravia, podría sumarse a otros municipios con circulación autóctona del virus; principalmente en los departamentos de: Anta, San Martín, Orán y Capital.

El hecho nos es más que el desenlace obvio de una situación ampliamente denunciada por los vecinos de Cerrillos: El pueblo se está convirtiendo de a poco en un basural. La proliferación de focos infecciosos, la acumulación de desperdicios en espacios públicos (algunos de ellos insólitos como la puerta de un supermercado), sumada a los escasos o nulos trabajos de limpieza, contribuyeron a la propagación del mosquito transmisor, según denunciaron los habitantes a este medio. «Los servicios están totalmente ausentes y no  se ve que haya personal. Limpian un día y no se los ve más en toda la semana», advirtieron.

En tiempos en que las medidas de protección y limpieza deberían ser extremas por la doble amenaza dengue-coronavirus, el municipio vecino del sur recibe a sus visitantes con un sembradío de microbasurales desperdigados a ambos lados de la recta de Cánepa. Restos de maleza acumulada en la vía pública, posiblemente como producto de trabajos que los vecinos se ven obligados a hacer de manera particular, reposan días enteros a la espera de ser recolectados.

A la enorme incertidumbre de los vecinos, la intendenta Yolanda Vega le suma todavía más interrogantes como el pago de sueldos y, por ende, la continuidad de los servicios: “La situación económica de mi municipio es bastante dramática porque no estamos llegando a cumplir, con los fondos coparticipables y con lo poquito que hemos recaudado, no llegamos a cubrir los sueldos, así que estamos muy complicados”, declaró el mes pasado.

La preocupación de los vecinos por cuestiones tan elementales como la recolección de residuos no es nueva y, de hecho tiene antecedentes relevantes en el pueblo. Aunque parezca mentira, hasta sirvió de plataforma de campaña para que en 2015, la actual jefa comunal llegara al poder diferenciándose de su antecesor Rubén Corimayo. A mediados de ese año declaraba a este medio: «La gente reclama todos los días por la recolección de basura por ejemplo. Lo único que le interesa (a Corimayo) es cumplir con sus compromisos políticos, descuidando su mandato”.

La preocupación de los vecinos por cuestiones tan elementales como la recolección de residuos no es nueva y, de hecho tiene antecedentes relevantes en el pueblo

Apenas unos meses después, en marzo de 2016, el concejal Ariel Berruezo denunció a Vega ante la fiscalía penal por incumplimiento de ordenanzas municipales vinculadas a la emergencia sanitaria de salubridad e higiene. En concreto, por no llevar a cabo la recolección de residuos. Berruezo se presentó ante la Fiscalía Penal de Cerrillos material fotográfico mostrando la no recolección de basura en domicilios, podas y pastos en distintos puntos del municipio. Desde la fiscalía se solicitó al denunciante que amplíe sus dichos y precise los lugares que están graficados en el material fotográfico, a fin de que la policía pueda hacer la constatación correspondiente. Pero no hubo ninguna citación a funcionarios, ni vecinos.

 

La falta de atención y de obras también llevó a que en febrero de este año, un grupo de dirigentes y referentes de 24 barrios plantearan la intención de independizarse del municipio de Cerrillos. El proyecto “Nuevo Municipio – La Isla (Ruta 26)” fue presentado en la cámara de diputados y consiguió el apoyo de organizaciones sociales y sindicales. En el detalle puede leerse: «En la creación de este proyecto se incluyen 24 barrios, fincas y parajes con el detalle de cada uno. La iniciativa estuvo a cargo de la comisión directiva del Barrio Las Tunas, con apoyo de vecinos, referentes barriales, organizaciones sociales y sindicales». El proyecto secesionista no prosperó, pero la falta de respuestas siguió intacta.

Las populosas barriadas de las zonas este y oeste aguardan hace años la prestación de servicios eficientes que impidan la proliferación de basurales, como así también las inundaciones propias del periodo estival. El crecimiento urbano de los últimos años, según comentan los vecinos, no fue acompañado de una planificación eficiente y los resultados quedan en evidencia.

El ex intendente Rubén Corimayo, hizo referencia a la problemática y sostuvo que «hoy la ausencia de personal, en lo que hace a la recolección y al barrido diario, es inexistente. La verdad que no se advierte, lo que es barrido de calles, cordón cuneta, recolección de residuos es totalmente nula». Además deslizó que la comuna no cuenta con el personal necesario para la prestación de servicios. «Estaban haciendo desmalezado en ruta 26 como consecuencia de que hubo personal de la cárcel federal que estaba con síntomas de dengue, pero en lo que refiere a los otros barrios, no están siendo atendidos; tal vez como consecuencia de la falta de personal municipal».

El sistema sanitario, para colmo, no parece estar preparado en lo más mínimo para afrontar una eventual contingencia por casos de COVID-19 y dengue. La reciente entrega de una ambulancia por parte del gobierno provincial, no parece suficiente considerando que el hospital de antemano carecía de vehículos en buen estado para atender urgencias.

El personal afectado a los diferentes centros de Salud y al hospital local Santa Teresita también resulta escaso si se contempla el crecimiento que tuvo el área operativa. «No hay una cantidad suficiente de personal de manera permanente trabajando. Acá hay algunos centros de salud que pudieron ser refaccionados desde el gobierno provincial, pero se observa que el personal no es suficiente», agregó Corimayo.

Donde no falta personal, sin embargo, es en el gabinete municipal/familiar de Vega. A poco de asumir, la jefa comunal nombró a su hijo como secretario de Gobierno, a su hermana como secretaria de Acción Social, ahora delegada municipal, y a su sobrina en el área de Prensa.