La Fiscalía solicitó juicio para los tres hermanos Saavedra dando a conocer diferentes pruebas reunidas en su contra. La declaración de la ex novia de uno de ellos que aportó algunos detalles, aun no difundidos.
Andrea Sztychmasjter
Si el proceso judicial correspondiente se realiza y finalmente la causa es elevada a juicio será la segunda vez que se realice una investigación para determinar ¿Quién mató a Jimena Salas? Porque a más de seis años de su femicidio no hay personas con condenas por el crimen en la vivienda de Vaqueros aquel mediodía de enero del 2017.
Sergio Horacio Vargas, alias “Porteño”, un vendedor ambulante absuelto por el principio de la duda en calidad de partícipe secundario -quedando inmediatamente libre en mayo de 2022-. Y Nicolás Federico Cajal Gauffín, esposo de la víctima, también absuelto por la duda del delito de encubrimiento agravado, en calidad de autor, fueron el saldo de una investigación desafortunada, llena de agujeros oscuros, de imprecisiones y mal accionar.
Un asesinato que causó conmoción y que dejó en claro que en Salta se puede matar y los crímenes quedar en total impunidad, tal como lo muestran diferentes casos no resueltos en la provincia o para ser más precisa, asesinatos sin asesinos.
Se requirió
El viernes de la semana pasada a última hora, se daba a conocer que la Fiscalía requirió juicio para Javier Nicolás Saavedra, Carlos Damián Saavedra y Adrián Guillermo Saavedra. Aunque durante todo el fin de semana y el lunes mismo la noticia se encontraba en todos los portales de difusión, según detalló el abogado defensor de los hermanos, Marcelo Arancibia, no había sido notificado oficialmente: “Se enteraron todos, pero a mi mail y a mi oficina no llegó nada”, criticó el letrado.
En la hipótesis abonada por los Fiscales sostienen que “los acusados habrían utilizado a la mascota, de propiedad de uno de ellos, para sensibilizar a la víctima, dejándola en estado de vulnerabilidad, lo que fue aprovechado para ingresar al inmueble con fines de sustracción de elementos de valor, situación que derivó en el violento ataque a la mujer con más de un arma blanca, ofreciendo ella resistencia, provocándole múltiples lesiones que derivaron en su muerte”, señaló el Ministerio Público Fiscal.
Agregaron que de “un informe del Departamento de Criminalística del CIF revela que del cotejo de imágenes y elementos secuestrados en la causa con fotografías aportadas por testigos y obtenidas del celular de la víctima, tienen correspondencia con la imagen de una mascota y de un par de zapatos y con una mochila y un par de anteojos que se encuentran secuestrados”.
La mascota
Del detalle de las audiencias de declaración de la ex novia de uno de los hermanos, se desprende que la perrita caniche toy de color gris fue un regalo que Javier Saavedra le realizó por su cumpleaños en noviembre de 2016, que ella no podía tenerla en su vivienda por lo que la mascota se quedó en casa de los Saavedra hasta el 1 de mayo cuando falleció, día en el que además decidieron enterrarla en la esquina de la plaza de Parque Belgrano.
Según determinaron lxs fiscales, días previos al crimen de Jimena y “desplegando el mismo modus operandi del uso de la mascota para sensibilizar, (los hermanos) abordaron a otras mujeres en la misma zona de Vaqueros y que por distintas circunstancias, afortunadamente, no lograron concretar ningún ilícito”.
En la misma acta de audiencia de declaración al ser consultada la ex novia sobre las fotos difundidas desde la Fiscalía donde se ve a un hombre que sostiene una perra, ultima fotografía que habría sacado Jimena Salas antes de ser asesinada, la joven declaró: que la perrita de la foto se parecía a la suya, pero no recuerda si cuando vio las fotos su perra ya estaba viva o muerta. Que vio las fotos y le hizo acordar a su perrita. Que en su momento lo comentó con su entonces novio, quien le infirió que no se parecía a su perrita.
Durante la declaración a la joven se le exhibieron dos identikits correspondientes a la causa y tres fotografías de un masculino con un caniche toy extraídas del celular de la víctima, así como otras tres fotografías aportadas por una vecina. La ex novia declaró al respecto que las ropas que se ven en las fotos “es del estilo que usaba Javier”.
Los zapatos
Por otro lado, a la ex novia también se le mostraron fotografías del expediente policial incorporadas a la causa, las imágenes fueron sacadas del Facebook de Javier Saavedra donde se lo ve con unos zapatos: “La declarante comienza a llorar, observa un parecido en los zapatos de esta foto con las anteriores que se le exhibieron, observa el llavero en el bolsillo.. observa que Javier tiene menos barba como recortada… que esos zapatos que ve en la foto no los reconoce, no recuerda haberlos visto antes, que no tienen cordones. Que en el momento de la foto ya estaba de novia con él. Se hace un cuarto intermedio de unos minutos porque la declarante rompe en llantos”, aseguran las actas de su declaración.
Otras Pruebas Fiscales
Aparte de las dos pruebas arribas detalladas; la mascota y unos zapatos, la Fiscalía mencionó que existen otras pruebas que dan cuenta de la responsabilidad de los hermanos Saavedra, aunque solamente se haya encontrado perfil genético en la vivienda de Jimena de uno de ellos. Las mismas corresponden a sangre del imputado encontrada en distintos puntos y objetos de la vivienda de barrio San Nicolás, entre ellos, en el hombro de la remera de una de las hijas de la víctima, como así también en acolchado, piso de la cocina, goteo en el pasillo y habitación principal.
Además, señalan se constató la presencia de vehículos de propiedad de los imputados, ahora secuestrados, situados en las inmediaciones del lugar del hecho, en día y hora precisa, considerando que los mismos fueron indispensables para la comisión del hecho y para asegurar la posibilidad de rápida huida del lugar.
Otro elemento probatorio de relevancia lo constituye el informe psicológico realizado a los tres imputados debido a las violentas características del hecho. A través del mismo se pudo conocer que dos de los acusados presentan antecedentes de consumo de sustancias estupefacientes y alcohol, que registran indicadores de peligrosidad y bajo control de sus impulsos en el desarrollo de sus relaciones personales.
Respecto del otro imputado, revela una personalidad con rasgos psicopáticos, narcisista, egocéntrica y carente de empatía, con indicadores de alta peligrosidad, principalmente hacia las mujeres.