En el marco de la investigación por la desaparición del joven salteño Daniel Solano, comenzaron ayer, las tareas de excavación en la Comisaría Octava de Choele Choel, lugar donde fue visto por última vez. Dos de los policías detenidos por la causa iniciaron una huelga de hambre pidiendo que se les devuelva “el buen trato”.
Ordenadas por el juez penal Julio Martínez Vivot y solicitadas por la fiscalía y la querella, comenzaron las excavaciones en la Comisaría del lugar donde Daniel fue visto por última vez luego de asistir a un local bailable. Con la excavación en al menos tres lugares de la unidad policial, la familia de Daniel Solano cree que podrían encontrarse rastros del cuerpo del joven salteño que llegó a la región para trabajar en la temporada en una empresa frutícola y desapareció el 5 de noviembre de 2011, luego de que fuera retirado por la policía del boliche.
Dos integrantes del Equipo Argentino de Antropología Forense, en compañía de obreros de la región, dieron inicio a las excavaciones en los lugares en los que el georradar de Gendarmería había detectado anomalías. Aquella pericia fue practicada en octubre y se complementó la pasada semana para poder llegar ahora a la etapa de excavación, que se realiza en el sector de calabozos, en el sótano de la comisaría y en un mástil ubicado en el patio de ingreso a la cárcel de encausados.
Los antropólogos buscarán los restos óseos de Solano, quien lleva más de 25 meses desaparecido. Su familia se encuentra instalada en el Valle Medio, a miles de kilómetros de su tierra natal, pidiendo que se haga justicia y se encuentre el cuerpo del joven para poder retornar a Salta.
«Desde las 12:30 hasta las 18 estuvieron trabajando en el lugar. Excavaron en los pasillos de los calabozos y no encontraron nada de relevancia. Mañana se van a dedicar al mástil y al nicho (del subsuelo), lugares donde más irregularidades marcaba el georradar», indicaron ayer desde la querella. En el lugar trabajaron dos antropólogos forenses y obreros de una empresa de construcciones de Luis Beltrán.