Después de más de doce horas de protesta, los trabajadores levantaron la toma del ministerio al que habían ingresado al mediodía del martes.

La decisión de levantar la protesta se tomó alrededor de la 1 de la mañana luego de que los representantes de los trabajadores fueron recibidos por las autoridades provinciales y, según informaron, el Gobierno «firmó el acta comprometiéndose a dar respuestas a los reclamos planteados», principalmente la reactivación del astillero.

La decisión de tomar el Ministerio se dio luego de que el gobierno de María Eugenia Vidal incumplió el lunes el compromiso de avanzar con una reunión entre las partes.

La semana pasada los trabajadores habían tomado la planta ubicada en Ensenada, manteniendo de rehén al interventor, Daniel Capdevila, y parte de la gerencia de la empresa. Esa toma fue levantada después de varias horas de tensión tras la firma de un acta acuerdo. En el texto, el gobierno se comprometía a enviar insumos para reactivar la producción y a realizar el lunes de esta semana una reunión con los ministros Hernán Lacunza (Economía) y Marcelo Villegas (Trabajo).

Sin embargo, el lunes no hubo contacto por parte de los ministros y los insumos nunca aparecieron.

Paro y toma

El astillero de Ensenada suspendió sus actividades hace casi dos meses, en medio de una fuerte crisis y denuncias de corrupción. «No tenemos insumos para terminar dos construcciones. Dijeron que no van a poner un peso para terminar esas obras», explican los delegados.

Desde el Gobierno, sostienen que pese al crecimiento del personal el Astillero no logra cumplir con los plazos de ejecución de los trabajos acordados. Y explican que para que la construcción de un barco como los petroleros de PDVSA sea rentable debe llevar no más de dos años en su ejecución. Sin embargo actualmente hay dos barcos en construcción que ya llevan más de 10 años y aún les falta al menos un año para estar listos.

Desde La Plata arrojan números: el Astillero tiene 3251 trabajadores y le cuesta a la Provincia $ 3.500 millones al año. La planta solo genera el 1% de su costo y el otro 99% lo financian los bonaerenses con sus impuestos.

Además, aseguran que de los 3.251 trabajadores, el 70% tiene sueldos promedio de $40.000. Un 18% pertenece a puestos jerárquicos y percibe salarios que van desde los $100.000 a los $300.000 por mes.