Los involucrados en el envenenamiento masivo de San Luis tendrán ahora que responder por el delito de «Envenenamiento de sustancias alimenticias», previsto en el art. 200 del código penal. Prevé una pena de entre 3 y 10 años de prisión.
El fiscal penal de Cerrillos e interinamente a cargo de la fiscalía de Rosario de Lerma, Gabriel Portal, formalizó la acusación contra Sebastián Saravia Zenteno y Roberto Flores por el delito de envenenamiento de sustancias alimenticias. Ambos estaban ya imputados por el delito de maltrato y actos de crueldad contra animales. Flores también está acusado de amenazas en concurso real.
El delito de envenenamiento de sustancias alimenticias está previsto en el artículo 200 del C.P. y establece: «Será reprimido con reclusión o prisión de tres a diez años, el que envenenare o adulterare, de un modo peligroso para la salud, aguas potables o sustancias alimenticias o medicinales, destinadas al uso público o al consumo de una colectividad de personas. Si el hecho fuere seguido de la muerte de alguna persona, la pena será de diez a veinticinco años de reclusión o prisión».
Para el fiscal Portal, los hechos se encuadran claramente en este delito ya que «se encuentra plenamente acreditado que los encausados crearon un peligro común, puesto que envenenaron trozos de carne, lo que finalmente causó la muerte de cuantiosos animales, pero si se examina tal conducta, la misma causó colateralmente la intoxicación de dos personas, quienes al entrar en contacto con sus animales que fueron envenenados, sufrieron también los efectos de la sustancia venenosa Carbofurán”.
En este sentido, el fiscal aporta un nuevo dato, puesto que no estaba corroborado aún si la intoxicación de dos personas cercanas a la finca, estaba vinculada con el accionar de Flores y Zenteno.