La remarcación en los precios puede impactar en las manufacturas locales y en los de panaderías se proyecta aplicar entre el 8 % y el 10 %, debido a la imposibilidad de afrontar las subas en los insumos y la imposibilidad de acceder a facilidades previsionales o crediticias. Así lo indicó un comunicado de los empresarios salteños, cuya Cámara del sector confirmó el exhorto enviado por la Federación Nacional a la Secretaría de Comercio de la Nación, a fin que intervenga con celeridad para evitar más incrementos en el precio de estos productos.
En este pronunciamiento FAIPA cuestionó los saltos en los precios de materias primas como huevos, harina, aceite, levadura y margarinas, que se usan para la elaboración de panes y facturas. Esto sucedió en paralelo a las bajas producidas en las ventas del orden del 30 % y el 60 %, como consecuencia de la recesión proveniente del macrismo y la declaración de pandemia, dos calamidades que compiten por el puesto de la más virulenta.
Además, detallaron la queja que “casi nadie de nuestra actividad, ha logrado acceder a los beneficios de los ATP ofrecidos por el Gobierno Nacional, como tampoco a los créditos a tasa 0, ni a los que ofrecen los bancos al 24%”. Otra de las fábulas lanzadas con el interés de llevar algo de tranquilidad a todos los sectores por igual, partiendo de lo inverosímil que el sistema financiero acostumbrado a tasas del 78 % de pronto aceptara prestar a 54 puntos porcentuales menos. Y ni qué hablar de hacerlo a 78 % menos.
Por ello, los panaderos afirmaron que la única salida será adoptar una remarcación de precios de entre el 8 % y el 10 % “en todos los productos farináceos que se expenden en la panaderías, ya que de lo contrario no podremos seguir absorbiendo estos aumentos desmedidos de las materias primas”, concluyó este pronunciamiento.