María Emilia Soria, diputada nacional del PJ por Río Negro, sorprendió al jefe de Gabinete, Marcos Peña con una peculiar protesta: mostró una manzana importada de Chile mientras los productores nacionales se hunden en la crisis.
La joven diputada le exigió al funcionario de Cambiemos que el Gobierno reciba a los productores frutícolas de su provincia, que afectados por las medidas económicas protestaron el martes en Plaza de Mayo regalando miles de kilos de frutas y verduras.
Pero, ¿quién es la diputada? María Emilia Soria es hija de Carlos Ernesto Soria, electo gobernador de la provincia de Río Negro que fue asesinado por su esposa, Susana Freydoz, de un balazo en el rostro a 21 días de asumir, el 1 de enero del 2012 en la casa quinta familiar de las afueras de Roca.
Es oriunda del Alto Valle, donde estudió en los mejores secundarios y fue fuertemente custodiada por su padre, hasta que se marchó a Capital Federal para estudiar abogacía. En el año 2013, tras la trágica muerte de su padre a manos de su madre, Soria se lanzó como candidata a diputada del Frente para la Victoria (FPV) por Río Negro, y su postulación fue furtemente criticada por varios peronistas por su nula participación anterior en política. Sin embargo, la hija del «Gringo» Soria logró su cometido.
Este año, la diputada ha presentado 6 proyectos de ley y ha estado presente en el 55% de las sesiones de la cámara Baja, votando a favor de proyectos como la ley antidespidos, la Incorporación del procedimiento de flagrancia para delitos menores o la instauración de la figura del arrepentido para los casos de corrupción.
Estuvo ausente en el tratamiento de iniciativas como la autorización del allanamiento a la casa del diputado Julio de Vido, la ley de Autopartes y los Incentivos fiscales para las pymes, por nombrar algunas. Votó negativamente el proyecto de Extinción de dominio y repatriación de bienes y el blanqueo de capitales y pago a jubilados.
Fuente: La Nación
