Oficialistas y opositores cruzaron opiniones sobre el acuerdo con los buitres en los primeros minutos del debate. Laspina, Kicillof, Heller y Pitrola protagonizaron las chicanas más picantes.
“Estamos ante una alternativa de hierro: no queremos el ajuste fiscal o el ajuste inflacionario que propone el kirchnerismo, queremos ir por una tercera vía que es el crecimiento”, sostuvo el diputado macrista Luciano Laspina, titular de la comisión de Prespuesto, en el inicio del debate del proyecto para pagarle a los buitres y salir del default.
Laspina, encargado de defender el proyecto oficial, opinó que “no hay nadie que considere que hay alguna chance de revivir la cláusula Rufo” (que venció a fines de 2014 y estipulaba que no se pagaría más a los buitres que a los incluidos en los canjes voluntarios de 2005 y 2010, o se igualaba la oferta) y afirmó que es “bajo” el riesgo de litigiosidad que generará la aprobación del acuerdo.
El diputado y economista de PRO sostuvo que “la estrategia de los bonistas es no llegar a un acuerdo, porque es el mejor negocio financiero para ellos y el peor para el país” y defendió la negociación del Gobierno, hecha en “un panorama de extrema debilidad”: “Estamos frente a casos donde fueron agotadas todas las instancias judiciales y la Argentina fue derrotada”, afirmó en su presentación.
Para Laspina la negociación fue “tremendamente exitosa” porque de los 18.000 millones de dólares de deuda original se acordó pagar menos de 12 mil millones. Se trata, dijo, de una “quita esperada del 38 por ciento o a una quita de los intereses acumulados equivalente al 56 por ciento”.
Luego fue el turno de Axel Kicillof, del Frente para la Victoria, que rechazó el proyecto oficial con serias advertencias: “Los fondos buitres se reservan el derecho de seguir accionando legalmente”, aseguró. “De muestra basta un montón, todavía no se aprobó esta ley y ya tenemos problemas”, dijo por el fallo de la Corte de Apleaciones de Nueva York que suspendió el viernes pasado el levantamiento de las restricciones contra el país, hasta escuchar apelaciones de bonistas que quedaron afuera. “Ya han aparecido acreedores del 93% diciendo que van a accionar legalmente”.
“¡Qué más pruebas de que esto está en el aire!”, exclamó el ex ministro.
Sostuvo que este arreglo implica a la mitad del 7% de los bonistas que quedaron afuera. “Queda la otra mitad suelta y boyando: ¿No estará Paul Singer ahí, no va a aparecer de nuevo?”, advirtió.
Kicillof dijo que su bloque proponía “pagarle al 100% en condiciones equitativas, sostenibles, legales. Proponemos pagar al valor actual de lo que entraron en 2005”.
“Pedimos que primero levanten el ‘pari passu’. Pero han seguido con la extorsión y la espada de Damocles. Singer sigue como un moscardón a ver que consigue”, insistió.
Lueego fue el turno de Carlos Heller, del Partido Solidario, aliado a los K, quien también defendió su propio dictamen de minoría. Rechazó el proyecto oficial y señaló que debe ofrecerse al 7% que no entró al canje “las mismas condiciones de 2005”.
El último dictamen de minoría fue del Partido Obrero. Néstor Pitrola afirmó que la sesión iba a “pasar a la historia como una página negra” y rechazó “el pacto buitre”.
Fuente: Clarín