El gobierno anuncia como un éxito que 3500 personas en Embarcación fueran asistidas por el tren de desarrollo social y salud Eva Perón. ¿Qué pasará cuando el tren se vaya? ¿qué pasaba antes que llegara?
La noticia es presentada como si fuera un logro. La fotográfica ministra de Derechos Humanos pasea por la estación de trenes de Embarcación. Mientras los funcionarios “hacen prensa”, el tren de Desarrollo Social y Sanitario Eva Perón brinda atención vinculada con el área social y de salud integral, además de múltiples acciones de promoción, prevención, contención, capacitación y desarrollo local.
Durante la semana que el tren estuvo en Embarcación se atendieron a más de 3500 personas; según se informó oficialmente.
En materia de salud se atendió lo vinculado a atención primaria de la salud, promoción y prevención, especialidades médicas (ginecología, odontología, clínica médica, pediatría, enfermería) farmacia y vacunación, el ABC de la medicina.
Además al tren Eva Perón (que ya recorrió Ballivián, Cornejo y ahora Pichanal), lo acompaña un camión oftalmológico, donde se atienden alrededor de 120 personas por día, las cuales si es necesario, reciben los lentes recetados.
Se presenta como muy positivo decir que se atendieron unas 600 personas por día, en lo referente al área social, pensiones asistenciales y de servicio social así como de ayuda urgente vinculada con problemáticas de salud, pero en definitiva es un “paleativo móvil” a una necesidad constante e insatisfecha.
La buena noticia entonces se transforma en un montón de preguntas: ¿Qué pasó con esos 3500 salteños antes que el tren llegara?, ¿qué pasará cuando el tren se retire?, ¿dónde está el Fondo de Reparación Histórica?, ¿el gobernador no suma siete años en el cargo y quiere renovar por cuatro más?, ¿por qué tantas fotos?, ¿los funcionarios de qué se ríen?.
La ministra de DDHH pasea junto a Alfredo Llaya, intendente de Embarcación, y denunciado formalmente ante la justicia federal, como colaborador civil de la dictadura militar. Si evita viviera, seguro participaba de este make up del atraso y la miseria.
Seguramente la ministra nunca lo sepa, pero un militante peronista (Víctor Elías) denunció años atrás a Llaya por facilitarle autos a los milicos para que repriman a los compañeros.
La noticia hoy es que Eva Perón llegó a Embarcación y aunque no enmiende el abandono de la población, siempre es bueno que haya un derecho, donde hay miles de necesidades….