Como consecuencia del deplorable acto de robo que afectó partes de la escultura erigida para conmemorar el bicentenario del fallecimiento del General Martín Miguel de Güemes en la Quebrada de la Horqueta, hecho inicialmente reportado por Cuarto Poder, se ha tomado la determinación de trasladar dicha obra al Museo de la Vida Rural en la Finca de la Cruz. Este incidente nos insta a reflexionar sobre la valoración y el espacio que dedicamos en la actualidad a aquellos que dejaron una impronta significativa en nuestra historia.
Por Angie Burgos
Desde el sistema educativo, se apuesta a proporcionar una enseñanza que dedique atención especial a la historia y trayectoria de hombres y mujeres que dejaron una marca significativa en momentos y procesos históricos cruciales para Argentina. La figura de Güemes se destaca en este enfoque, siendo su vida, logros y características objeto de estudio en las aulas y motivo de análisis para los alumnos de primaria.
Incluso, hay un evento en Salta que resulta imposible de ignorar, la «Guardia bajo las estrellas», que se celebra en la provincia cada 16 de junio desde 1956 para conmemorar la noche anterior a la muerte del General Martín Miguel de Güemes. Durante esta vigilia, los gauchos se reúnen en el monumento Güemes y en la Quebrada de la Horqueta.
«Uno entendería que estas figuras, que debieran unirnos a todos los salteños y salteñas, deberían respetarse, lamentablemente no fue así” reflexionó el secretario de Cultura, Diego Ashur.
Preservar el patrimonio histórico y valorar los monumentos como parte fundamental de nuestra identidad colectiva es crucial. No solo implica conservar estructuras físicas, sino también mantener viva la memoria histórica y fomentar un sentido de pertenencia y aprecio por nuestro pasado. Los actos de vandalismo desvalorizan estos monumentos históricos, que nos permiten comprender la importancia de eventos y figuras del pasado, así como apreciar la evolución de la sociedad a lo largo del tiempo. Como reza una conocida frase, «un pueblo sin memoria es un pueblo sin futuro».
No puede pasar por alto que esta escultura ocupa además, un lugar simbólico y físico fundamental en cuestiones turísticas, culturales y educativas en la sociedad salteña . Por tanto, es crucial reconocer y proteger nuestro patrimonio histórico para garantizar su legado a las futuras generaciones.
El cuidado del patrimonio cultural, tanto tangible como intangible, resulta imprescindible, ya que representa el pasado, presente y futuro de una sociedad. Asimismo, es importante recordar que el patrimonio cultural no se limita únicamente a monumentos y colecciones de objetos, sino que también abarca tradiciones y expresiones heredadas de generación en generación. Por lo tanto, la existencia de actos de vandalismo hacia lugares tan importantes y representativos como la escultura de Güemes nos debe llevar a reflexionar y buscar estos actos no se vuelvan a repetir.