El plan consiste en comprar 3 millones de dosis de la vacuna Sinopharm y será presentado al gobierno nacional en los próximos días.
El jueves pasado, según consignó Clarín, se llevó a cabo una reunión entre representantes del sector farmacéutico y el gobierno. Allí se barajó la posibilidad de que el empresariado adquiera una importante cantidad de dosis de la vacuna china Sinopharm para comercializarla de manera particular en farmacias.
Laboratorios, farmacias y droguerías podrían conseguir un stock inicial de tres millones de dosis, que equivaldrían a un millón y medio de vacunas, a un precio de 26 dólares cada una, sin impuestos de por medio. Así, tomando el dólar oficial a $ 95, la inversión inicial sería de unos 78 millones de dólares, aunque sumado el componente impositivo ese número podría duplicarse y trepar hasta los 156 millones. Esto llevaría a 52 dólares cada dosis de la vacuna china.
De esta forma, el costo mínimo por cada persona vacunada con dos dosis sería de $ 4.940, sin impuestos, o $ 9.880 sumando el factor impositivo, o sea, lo que suma el Estado en impuestos. Teniendo en cuenta el margen de distribución local y comercial, estiman que un precio al que se podrían vender al público, de manera privada en farmacias, sería de unos US $ 80 por dosis, un 50% más del valor a la que se adquiere, $7.600.
De esta forma, una persona que quisiera ser vacunada sin esperar un turno de los que otorga el Estado, debería pagar alrededor de $ 15.200 para aplicar las dos dosis. Muy lejos de la gratuidad de las vacunas que aplica el Estado.