Tras dos semanas de huelga y con cortes en el acceso a la ciudad, los docentes autoconvocados definirán si continúan con la medida de fuerza. En el medio, el gobierno debe definir si suspende o no las clases por la amenaza del coronavirus.
Las acciones y el devenir informativo en torno a la amenaza mundial del coronavirus desplazaron de la primera plana la lucha docente que ya lleva dos semanas con paro de actividades y cortes en los accesos a la ciudad. Paralelamente, el gobierno debe definir en las próximas horas si suspende o no las clases para anticiparse a la propagación del virus en la provincia.
Lo cierto es que entre la docencia autoconvocada hoy se debate la efectividad de la medida ante la falta de visibilidad y la posibilidad de que se decrete la suspensión de actividades en las aulas. Por tal motivo, el sábado próximo se realizará una asamblea para definir si la medida queda en suspenso o si se continúa en las calles.
En paralelo, el éxtasis de los líderes gremiales que negociaron a la baja, ante la posibilidad del levantamiento, se vuelve cada vez más indisimulable. En la mañana de hoy se publicó una solicitada paga en el diario de mayor tirada que lleva la firma de Patricia Caliva y Carlos Murga, defenestrando la medida de fuerza.
Por otro lado, en un despliegue monumental de botonismo, el secretario general de AMET Eloy Alcalá hizo circular esta mañana capturas de las conversaciones de docentes autoconvocados, en las que se analiza el levantamiento de la medida.