Los legisladores opositores eran 128 y necesitaban 129 para el quórum. A último momento, el polémico diputado se levantó de su banca e impidió la sesión por los aumentos de tarifas. La polémica explicación que dio. VideoSA)
Las principales fuerzas de la oposición fracasaron este miércoles, por apenas un diputado, en su intento de lograr el quorum de 129 legisladores necesario para abrir una sesión especial de la Cámara de Diputados para tratar proyectos que retrotraen o frenan los aumentos de las tarifas de servicios públicos.
El presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, levantó el llamado a la sesión luego de una hora a la espera de que se formara el quorum.
El jefe de la bancada del Frente para la Victoria-PJ (FpV-PJ) Agustín Rossi, le reclamó más tiempo de espera, a lo que Monzó le recordó que el oficialismo no pudo juntar quórum para la reforma previsional y esa sesión se levantó “a los 40 minutos”.
Si bien los bloques peronista junto a la izquierda se habían abroquelado para buscar infringirle una derrota a Cambiemos, cuando estaban a punto de lograr el quórum para dar por comenzada la sesión especial, el diputado salteño Alfredo Olmedo decidió retirarse del recinto con el argumento que ya se había pasado el tiempo y que él estaba “desde las 11” horas.
La decisión de Olmedo generó el repudio de la massita Graciela Camaño, que denunció “una maniobra oscura que nos remonta a los peores momentos de esta casa, esto es peor que el diputrucho”.
Al oír esa declaración de Camaño, el salteño Olmedo volvió al recinto y recibió graves acusaciones de “corrupto” y “coimero”
“El reglamento dice que 11:30 se levanta. Hay que cumplir y ser ordenado en nuestro país, si están acostumbrados a negociar leyes, yo no. Nadie puede decir que soy corrupto. Tratan de embarrar a alguien que nunca negoció con nadie”, afirmó el salteño.
Fuera del recinto, en declaraciones a radio La red, Olmedo respondió: “La diputada Graciela Camaño me trató de corrupto y algo que no soy yo, ni mi hijo, ni mi padre, es ser corruptos; no voy a permitir que quieran ensuciar mi nombre”.