El estado norteamericano de Texas está a punto de aprobar una ley para que se penalice con miles de dólares la masturbación. Hay mucho pajero suelto por las calles, aseguran.
Un legislador del Partido Tejano Puritano de nombre Dick O’Hara ha propuesto cortar por lo sano con la práctica onanista luego de que se comprobara que el 87% de los pobladores en edad reproductiva se jalan el ganso o acarician la ostra.
“Los hombres deberían ser multados cada vez que se masturben. Da igual que sea en público o en privado”, aseguró O’Hara, quien además, en el caso de las clínicas de donación de esperma (un negocio próspero en la zona) argumentó que “Las emisiones masturbatorias generadas en esas instalaciones serán almacenadas para el fin de la concepción de una esposa actual o futura”.
Entre las razones para promulgar esta ley, se argumenta que “la eyaculación fuera de la vagina es un acto contra un hijo no nacido” y un fallo a la hora de “preservar la santidad de la vida”.
Además consideran que la cantidad de pornografía libre en internet ha generado toda una nueva ola de pajeros anónimos (anonimous wankers) que estarían en contra de la moral y las buenas costumbre texanas, a saber cagar a tiros a quienes intentan cruzar la frontera y/o maltratar a los negros.