Había logrado la adjudicación de un lote social, pero se encuentra usurpado desde 2016. Como no obtuvo respuestas, decidió encadenarse en las puertas del IPV y amenazó con prenderse fuego.

Andrea Vazquez logró en 2016 la adjudicación de un terreno en Atocha por parte del IPV, pero actualmente se encuentra ocupado por otra familia. La mujer tiene dos hijos de 6 y 7 años. En todos los oranismos a los que acudió obtuvo la misma respuesta: No se puede hacer nada sin una orden de desalojo.

La mujer también contó que en 2018, autoridades del Instituto Provincial de la Vivienda, firmaron un acta acuerdo para brindarle una solución, pero al día de hoy no hubo una respuesta.  Además de encadenarse a las puertas del organismo provincial, la mujer amenazó con prenderse fuego en caso de no tener una reunión con funcionarios.