Los intendentes bonaerenses peronistas se quedaron con el control de la Federación Argentina de Municipios. Cuando el final estaba cantado, el salteño Gustavo Sáenz renunció a su candidatura, que era apoyada por el macrismo y el massismo.

La Federación Argentina de Municipios (FAM) quedó en manos de la intendenta peronista de La Matanza, Verónica Magario. La jefa comunal hizo un llamado a los intendentes de Cambiemos, los del Frente Renovador y los cordobeses que responden a José de la Sota que no participaron del encuentro que la designo a partir de un fuerte respaldo partidario frente a los intentos del macrismo y de sus aliados por dividir su distrito.

La FAM era un espacio codiciado por Cambiemos que, con la gobernadora María Eugenia Vidal a la cabeza, intentan reducir el poder territorial del peronismo bonaerense y uno de los objetivos era arrebatarle la federación sin olvidar que la arremetida también tenía “como objetivo a Magario, quien no reniega del kirchnerismo como sí lo hicieron otros dirigentes justicialistas”, enfatizó Página 12 y otros medios nacionales como El Cronista Comercial.

Radicales y macristas de Cambiemos y del Frente Renovador no participaron y allí tuvo un rol simbólico el intendente de la ciudad de Salta, Gustavo Sáenz, quien de buenas relaciones con ambos espacios esperaba candidatearse para la conducción de la Federación.

Sin embargo, cuando ya quedaba claro que los movimientos de los intendentes peronistas no podrían ser frenados por la Casa Rosada y la fuerza de Sergio Massa, el salteño anticipo su renuncia a la candidatura en un comunicado en el que aseguró que “la FAM debe ser una institución que le sirva a todos los intendentes y no a un espacio de un partido político”, y agregó que “lo que se necesita es un espacio de trabajo que supere intereses electorales y divisiones mezquinas, no es uno contra otros, es todos juntos”.

Por su parte el subsecretario de Gestión Municipal del Ministerio del Interior, Lucas Delfino, cuestionó la designación de Magario y descalificó a la entidad al señalar que “quedó reducida a los intendentes kirchneristas”. El funcionario de la cartera que conduce Rogelio Frigerio apuntó que “en vez de institucionalizar la FAM a favor de los dos mil municipios de la Argentina, institucionalizaron la FAM kirchnerista que mantienen desde hace años”, y agregó que la entidad debía volver “a ser una herramienta al servicio de los barones del Conurbano”.