Dr. Queco Jones

Impresiona haber llegado a un balotaje con una figura impensada hace un año. El fracaso de una coalición meramente electoral nacida en el 2015, donde se disputaban los cargos nacionales un año antes de estas fechas, mostró las expectativas individualistas del ex presidente Macri de no querer ser un jarrón chino, como se los asimila a los ex presidentes.

Él es el gran responsable de llegar a este punto, cuando perdió deliberadamente? su renovación presidencial en el 2019, cuestión que también abonó, por izquierda, desde el populismo oficialista la ex presidenta, actual vice.

Los dos se salieron con las suyas, Macri sacrificando gustosamente sus aspirantes a sucederlo y ella arrinconando a la “democracia” atrás de un candidato codicioso que no trepidó en asumir todos los riesgos posibles.

Y en este revoleo político, una espiral descendente de la situación económica y social de la Argentina en su conjunto.

Massa/Milei…Milei/Massa un cara o cruz desconcertante puesto que creer en las promesas en campaña electoral sería por lo menos candoroso…

Massita resulta ser un gran farsante y Peluca un delirante temerario, con lo cual la ciudadanía responsable añora un candidato a presidente con dotes de estadista…cuestión que fue muy rara a lo largo de estos más de 200 años de vida de las Provincias Unidas del Río de la Plata.

Y en este contexto el gobernador Sáenz, trabaja denodadamente para lograr revertir el sorpresivo voto victorioso al León en la provincia de Salta.

Y más allá de que la provincia solo recauda en promedio casi el 25% de lo que gasta, justo es también recordar que el 75% restante que llega por coparticipación surge en gran medida de la cesión de cobro de impuestos al gobierno nacional; pero que genera una alarma “pour le galerie” en la hipótesis de que se imponga el jefe de los Libertarios.

Así también nuestro pragmático gobernador verá como adecua su gabinete, para su segundo y último mandato?, de acuerdo a quien salga electo presidente de la nación.

Lo tristemente real de todo esto es que, en el caso de Milei, todo el sistema o superestructura nacional ha abonado, por efecto u omisión, la posible llegada a la presidencia de un economista mediático, emocionalmente inestable, pero poco formado en lo que significa un Estado de Derecho.

Y en el caso de Ventajita, un compañero codicioso que conoce muy bien la lucha política peronista y no dudó de ir hasta el hueso para ser el candidato del peronismo y que se termina vistiendo como el candidato de la democracia…

Si la dimensión exacta de la política es la incertidumbre y la principal función de todo político es hacerle al ciudadano de a pié esa incertidumbre finita, palpable y segura, al decir del prestigioso intelectual francés Baudrillard, esta opción del balotaje del domingo nos demuestra que lejos de evolucionar democráticamente, pareciera que iniciaremos una etapa residual de involución representativa y democrática.