Con las elecciones en puertas continúan apareciendo disputas. Ahora con la presentación oficial del FUT (Frente Unido de los Trabajadores) la izquierda salteña está más dividida que nunca. Por Soledad García 

Hace apenas unos días atrás Claudio del Plá y Pablo López presentaron el sello político “Frente Unido de los Trabajadores” para poder presentarse a elecciones y, con el cual aparentemente se deslindaron de toda vinculación al Partido Obrero. Lograron conseguir la personería jurídica que deseaban ya que presentaron alrededor de 7 mil avales, pero indefectiblemente este duro revés golpeará a la izquierda que siempre conseguía algún cargo parlamentario.

Esta nueva situación que se presenta podría ser confusa para el votante de izquierda desprevenido que no está siguiendo la interna del partido ya que al momento de sufragar por su candidato de siempre (López o del Plá), verá su nombre bajo el sello político FUT, mientras que bajo el estandarte Partido Obrero, aparecerá la figura de alguien que quizás no tenga un rostro familiar.

Según especialistas políticos esta será una muy mala elección para la izquierda, en la cual ni siquiera hay certezas de conservar esas bancas que le aseguraban una intervención en el parlamento, esto debido a que incluso con ese tradicional 3% que siempre la votó,  ahora también estará fragmentado “Si llega a suceder eso, la culpa la tendrán que asumir Pablo y compañía, porque dentro de la mismo partido uno tiene la posibilidad de conformar una tendencia, está en el estatuto, pero no a este nivel donde llega a intervenir la justicia burguesa sobre algo que podemos decidir nosotros mismos”, exponía a Cuarto Poder una militante de la tendencia.

En Orán no existe el FUT de Del Plá

En la ciudad del norte de la provincia, el Frente Unidad de los Trabajadores no tiene relevancia “No tienen militantes, ni círculos ni siquiera han presentado candidatos en las últimas elecciones, hasta ahora solo está la tendencia aquí” expone el referente y también ex candidato a la vice gobernación Samuel Huerga.
Huerga por su lado manifestó que la situación de Orán, al igual que en el resto de la provincia gana la tendencia debido a que la militancia buscaba la renovación, pero que el plan de la dirigencia era otro: “Ellos abandonaron el partido, se fueron a armar el FUT porque Claudio del Plá, Cristina Foffani y Pablo López quieren seguir atornillados a los cargos; no comparten lo que discuten los compañeros en asambleas y plenario y terminan tomando acciones del tipo individualista” aseguró.

Testimonios que no dejan de aportar confusión al electorado. Conviene recordar que desde la vereda del FUT advierten que fue el propio Altamira quien al ser desplazado de la conducción en un congreso nacional rompe el partido y se lleva a gran parte de las bases sociales a su fracción, todo esto para permanecer en los órganos de dirección partidaria y la recuperación de algún cargo parlamentario.

Cabe recordar que Jorge Altamira ya había sufrido un duro golpe al perder las internas del FIT en el 2015. En ese momento un joven Nicolás del Caño rompió todas las expectativas y venció al histórico referente de la izquierda con un 51% de los votos. “A partir de ese momento las cosas se vinieron a pique para él, después ya no sabía ni que quería”, aseguró un militante del FUT.

“Interviene la ley”

El referente de la tendencia en Orán, Samuel Hurga arremetió contra sus ex compañeros e indicó que toda la situación terminó en manos de la justicia “Acaba de salir el fallo del juez Bavio. Cuando ellos se fueron del partido guardaron los libros contables y de acta. Como estaban entorpeciendo el funcionamiento, nosotros presentamos recursos legales, cartas documentos y nos tuvieron que devolver las camionetas, las trafic, los contables, todo. En función de eso, Bavio les dijo que si existía alguna diferencia partidaria, tenían que ir a los organismos internos e para resolverla. Lejos de ese fallo, ellos apelaron con la Cámara Electoral Nacional, dijeron que habían sacado, pero nunca fueron a los órganos internos a dar la discusión política por eso el nombre legal de Partido Obrero quedó en Salta para la Tendencia”, aclaró el dirigente.

Como en el viejo juego del teléfono descompuesto desde los dos frentes exponen sus argumentos y si, la gente que escucha desde afuera entiende, pero el mensaje llega a medias. Ambos aseguran que no había porque llegar “la justicia burguesa” para resolver los problemas, pero en concreto los dos sectores lo hicieron, Asimismo, insisten en que la solución no es estar en el parlamento, pero las acciones demuestran otra cosa.

Pese a las discrepancias que hoy aseguran tener, todavía guardan muchos puntos en común, por ejemplo, los referidos a la candidatura “No hay candidatos todavía porque eso va estar sujeto a los plenarios partidarios, está previsto que discutan los militantes de conjunto, hacemos asambleas, luego discutimos en los círculos y a partir de eso hacemos una caracterización política para decidir quiénes serán. En lo personal si mis compañeros deciden que tengo que ir, iré. Pero yo soy un laburante, trabajo igual con o sin candidatura, con o sin cargo. Igual milito por la lucha de los trabajadores con los docentes, con los trabajadores de prensa, no me quita el sueño tener un cargo o estar como candidato” finalizó Huerga.

Palabras similares decía la ex senadora Cerrano, “Nosotros no tenemos candidato aún porque no hemos hecho el plenario para decidir todavía, seguro será en abril, pero no importa quien vaya, acá estos defendiendo la idea del partido en conjunto y cualquiera de los compañeros está preparado”.

La situación más allá de candidatos, cuadros y discrepancias podría suponer una gran pérdida económica en caso de cumplirse los pronósticos desalentadores para la izquierda, puesto que implicaría una gran pérdida de la ayuda Asignación de recursos del Fondo Partidario.