Ayer recibió media sanción del senado nacional el proyecto que obliga a debatir a los candidatos a presidente. Cristina Fiore fue una de las autoras del proyecto y al respecto declaró que se trata de “un paso más para fortalecer la democracia”.
El Senado de la Nación aprobó en el día de ayer, con 46 votos a favor y 10 en contra, el proyecto de ley que establece la obligatoriedad de los debates presidenciales. Según la iniciativa, todos los candidatos que superen las PASO serán convocados a participar de dos debates, uno de los cuales se deberá realizar en el interior del país. Quienes no asistan serán sancionados con la quita de espacios de publicidad en medios audiovisuales.
Cristina Fiore, impulsora del proyecto junto a otros senadores, destacó la importancia del debate público porque “permite conocer y comparar las propuestas de los distintos candidatos, fortalece el derecho a la información de la ciudadanía y posibilita ejercer un control sobre el cumplimiento de las promesas electorales efectuadas por el candidato que resulte electo”.
“Nuestra propuesta procura institucionalizar una práctica política que permita un acercamiento entre el ciudadano y los candidatos a alcanzar la más alta investidura y dotar al sistema democrático de una herramienta esencial, que sin duda aportará al sistema eleccionario de un máximo de legitimidad”, destacó la legisladora.
