La ministra de Seguridad también señaló que los militares de los años 70 no fueron encarcelados por participar en la lucha contra el terrorismo, sino por «los métodos» que emplearon.

La vicepresidenta Victoria Villarruel expresó su descontento cuando el presidente Javier Milei le retiró el control sobre las áreas de Defensa y Seguridad, que habían acordado durante la campaña. Sin embargo, también se distanció de la decisión de la actual administración de ambas áreas de involucrar a las fuerzas armadas en la lucha contra el narcotráfico.

En este contexto, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, respondió a los comentarios de la segunda al mando del Gobierno y la instó a debatir el tema. Bullrich manifestó su disposición para el debate, al tiempo que advirtió a la titular del Senado que los militares de los años 70 no fueron encarcelados por participar en la lucha contra el terrorismo, como insinuó Villarruel, sino por «los métodos» que emplearon.

Al referirse a los esfuerzos de Bullrich y Petri para que los militares tengan una mayor presencia y lleguen a Rosario, donde actualmente desempeñan labores logísticas, Villarruel no dudó en expresar su descontento. «La función de los militares no es combatir a civiles. Pensé que eso había quedado claro en los 70. El narcotraficante es un civil. En los 70 se combatió el terrorismo, ¿y dónde están ahora aquellos que lo combatieron? Están presos», declaró la vicepresidenta para oponerse a la pareja ministerial.

Bullrich, en lugar de evadir el tema, aceptó el desafío en Radio Mitre. «Estoy totalmente dispuesta a entablar ese debate con la vicepresidenta», afirmó. La líder de Pro, alineada con los libertarios, señaló que en ese intercambio se debe discutir lo que ocurrió durante el gobierno de facto, en relación a si van «a abordar ese período de la historia» o si planean «revisar» ese momento y «analizar el futuro de estas fuerzas».

Convencida de que la constante asociación entre este sector y los años 70 genera una «parálisis» en el abordaje del tema, Bullrich afirmó que «comprende» los planteos de Villarruel, aunque subrayó: «También entiendo que el país debe ser capaz de sanar sus heridas y avanzar hacia el futuro».

La ministra también señaló que las fuerzas armadas son parte de la democracia, lo que generó un desacuerdo con la vicepresidenta, quien argumentó que los efectivos de la década del 70 están todos encarcelados, incluso con penas mayores a las de quienes ejercían el poder. «Lo que se está discutiendo respecto al pasado no es solo haber participado en la lucha contra el terrorismo, sino también los métodos que el Estado utilizó para combatirlo», afirmó Bullrich, refiriéndose a las desapariciones forzadas, las torturas y los crímenes de lesa humanidad cometidos por quienes tomaron el control del gobierno por la fuerza en ese momento.

Después de anunciar, junto a Petri, un conjunto de leyes que enviarán al Congreso, incluyendo la reforma de la Ley de Seguridad Interior para permitir que las fuerzas armadas intervengan en situaciones calificadas como «actos de terrorismo», Bullrich afirmó: «Tenemos que romper con lo que era considerado políticamente correcto y enfocarnos en lo que la sociedad necesita; ese es el debate que debemos tener».