El dirigente kirchnerista sostuvo que lo mejor sería suspender los comicios electorales.
El único partido que no se quiere jugar es el que no se puede ganar. Y no pasa día en que el presidente de ENACOM, Gonzalo Quilodrán, implore la suspensión de las elecciones en Salta, el próximo 4 de julio. La pandemia le ha caído como anillo al dedo: anhela que las elecciones se unifiquen para ver si así suman algún voto más. O lo que sería mejor: directamente no hacerlas. No ir a votar este año.
Una vez más Quilodrán solicitó al gobernador Gustavo Sáenz no ir a las urnas. El dirigente del Frente de Todos Salta remarcó que la complicación de la situación sanitaria era algo planteado desde enero. Por este motivo, llevar a cabo los comicios electorales le parecía algo «desatinado» y que podría poner en riesgo a todos los salteños. Además, señaló que hoy en regiones del país, el impacto de la segunda ola “es una realidad palpable, o un tsunami», como la definió Axel Kicillof.
En relación a las elecciones de Salta, las cuales estaban estipuladas para realizarse el próximo 4 de julio, indicó que no es algo que deba concretarse. “No parece algo atinado atendiendo la evolución de cómo se da la curva de contagio y el nivel de ocupación de las camas de internación”, detalló. Por este motivo, señaló que la suspensión de las mismas sería la mejor decisión en estos momentos.
Por otro lado, explicó que no se trata de una campaña política en contra del gobernador, sino que busca el bienestar de la sociedad. «Hemos decidido ser una oposición constructiva, responsable y dialoguista. A nivel nacional sabemos lo que es tener una oposición destructiva a la que no se le cae una sola idea”, sostuvo Gonzalo Quilodrán.
En realidad, en Salta ni siquiera les da el cuerpo para ser una oposición destructiva.