Compró una bodega importante en Mendoza.
La cervecería Quilmes concretó su desembarco en la industria vitivinícola. El plan piloto comenzó meses atrás, con el lanzamiento de una botellita de 1/3 bajo la etiqueta Root, y luego concretó la audacia de ofrecer un vino en lata.
Ahora se supo que Quilmes compró la bodega Dante Robino para entrar de lleno a la industria vitivinícola.
El presidente de Cervecería y Maltería Quilmes, Martín Ticinesi, dijo, por otra parte, que ninguna bebida pasó indemne la crisis económica de los últimos dos años. Sobre todo las alcohólicas, que no son de consumo básico. “El año pasado la categoría cervezas perdió 7 puntos de volumen”, dijo.
En el segmento de vinos el consumo per cápita está en los niveles más bajos de la serie histórica, tras tocar el mínimo de 19 litros en 2018. En 2013 la cifra era de casi 26 litros por cabeza. De todos modos, Ticinesi destaca que pese a este contexto el mercado del vino registró una “premiumrización”, es decir que dentro de la caída general hubo un crecimiento de ventas de las etiquetas de precio mediano y alto, contra el retroceso del vino de mesa y el tetrabrik.
Ahí apunta a jugar Quilmes con las marcas de Dante Robino. Su vino de mayor gama es el Gran Dante, que según variedad y año de cosecha cotiza entre los $700 y los $3.000 en Mercado Libre.