Policías oranenses denunciaron a un médico del hospital San Vicente de Paul. Lo acusaron de priorizar tener sexo antes de atender a pacientes que habían sido trasladados por los propios uniformados.

La información amenaza con ser tendencia en el día. Fue publicada por FM Profesional que precisó que dos patrullas policiales habían trasladado al Hospital San Vicente de Paul a tres detenidos que habían ocasionados disturbios pero no consiguieron atención porque el médico de guardia se encerró en una habitación con una mujer.

Según consta en las actas, la patrulla trasladó a los detenidos hasta el nosocomio porque requieren asistencia médica pero cuando se entrevistaron con un médico éste se negó a atenderlos y se metió en una habitación con una mujer. Durante más de una hora, los policías y los detenidos esperaron mientras escuchaban desaforados gemidos de placer.

Tras una intensa hora, el médico salió de la habitación, despidió con un beso a la mujer y se retiró del lugar sin brindarle asistencia a los detenidos. Sorprendidos, los policías discutieron por algunos minutos hasta que volvieron a solicitar asistencia y tras volver a pasar una larga espera, decidieron retirarse del hospital.