Walter Ceferino Nadal, murió el miércoles tras ser reducido por uniformados en plena capital provincial. Un testigo dijo que el hombre falleció por la presión de su cuello contra el suelo.

Según testigos, el uniformado presionó el cuello del sospechoso contra el suelo luego de reducirlo y a pesar de que la víctima le decía que no podía respirar. Algo muy similar a lo que pasó con George Floyd, el afroamericano asesinado por policías en Minnesota, Estados Unidos.

El informe policial indicó que la víctima, identificada como Walter Ceferino Nadal, murió como consecuencia de un infarto cuando intentaba escapar. Sin embargo, la autopsia finalmente reveló que el supuesto delincuente perdió la vida tras ser asfixiado y presentaba lesiones en el cuello. Todo ocurrió el miércoles pasado en pleno centro de San Miguel de Tucumán.

En la esquina de Crisóstomo Álvarez y Congreso, un hombre le dijo a la agente de la división Patrulla Urbana Jessica Gómez que Nadal lo había robado. La mujer pidió refuerzos y corrió tras el sospechoso.

En ese momento, se sumaron el oficial Cristian Gómez y las agentes Diana Suárez y Claudia Vizcarra, pero una cuadra después, vieron que los policías Josué Molina y Melanie Mariel Caliva ya tenían reducido al ladrón. Los efectivos informarían posteriormente que Nadal comenzó a sentirse mal cuando lo llevaban a la Seccional 1 y que luego de trasladarlo al hospital Padilla, murió por un infarto.

Sin embargo, la fiscal de la causa, Adriana Giannoni, ordenó la autopsia que terminaría por contradecir a la versión oficial.

Además del examen forense, fue clave el relato de un testigo que vio el momento de la violenta detención y que ya declaró ante la funcionaria judicial. Sus palabras detallan el abuso policial al que fue sometido Nadal en medio de una situación en la que ya estaba completamente reducido, y por lo tanto complican a los uniformados que participaron del procedimiento.

“Eran dos efectivos los que lo redujeron. Uno de ellos tenía su rodilla en la nuca. El hombre que estaba en el piso le decía ‘me falta el aire, me falta el aire’ , pero ellos no lo soltaron”, explicó el testigo, identificado como Ricardo, al diario La Gaceta.