Así lo afirmó el padre de Jorge Gury Farfán, quien murió en manos de efectivos policiales.

Tal como lo consignamos en la nota publicada este fin de semana Policía: ¿Todavía creés que están para cuidarnos? la muerte de Jorge «Guri» Farfán en febrero de este año en la comisaría N°12 de B° Santa Ana, puso sobre el tapete -aún más- el encubrimiento siniestro de los crímenes de estado perpetrados por la policía. «Gury» no necesitaba robar. Sus padres le habían dado $8000 el día en que fue asesinado. Sin embargo, esto no fue impedimento para que los azules involucrados en el hecho usaran como coartada la acusación de un grupo de jóvenes que lo golpearon hasta morir. A «Gury» no sólo no se le incautó ningún bien sustraído, sino que además sus pertenencias fueron robadas.

En un primer momento, desde la jefatura de policía hicieron circular la versión de que «Gury» era un delincuente que falleció por un «shock» derivado del consumo de sustancias. La autopsia develó que el joven murió por traumatismo de cráneo, traumatismo cerrado de tórax y traumatismo cerrado de abdomen; algo que ninguna droga hubiera podido ocasionar por sí sola.

En la reunión que mantuvieron en diputados con el Ministro de Seguridad, el padre de Gury se hizo presente y levantando su foto en alto pidió justicia por su hijo. «Mataron a golpes a mi hijo, el fiscal y el CIF maquillaron el crimen», sostuvo el padre.