Desde Buenos Aires, habló de un proyecto ecológico por el que no hizo nada y del cual ni siquiera conoce detalles mínimos. 

La aspirante a Senadora provincial por el Frente de Todos, Pamela Ares utilizó ayer sus redes sociales y además envió un parte de prensa eco-friendly. Si uno lee el parte, habla de una inversión del gobierno nacional y la hace quedar a ella como a una nueva defensora de la ecología.

Todo sea por un voto o, al menos, por figuretear: porque lo cierto es que el proyecto de Bosques Nativos, al cual hacen referencia sus publicistas, si bien es de Nación, se tramita sí o sí en Salta y es impulsado desde hace más de tres años por comprometidos técnicos de la secretaria de Ambiente de la Provincia.

Ares, quien pasa más tiempo en Buenos Aires que en Salta, jamás habló con ninguno de ellos para interiorizarse sobre el tema. Ni un llamado, ni un mail. Ni un emoji. Ni nada que se parezca a empaparse del asunto.

La mujer de Quilodran no tiene ni idea del proyecto y tal cual lo presentó terminó degradándolo porque es mucho más profundo de lo que ella cree y plasmó en su menesteroso parte.

Si se hubiera tomado el trabajo de tomarse un café con los técnicos de ambiente, tal vez habría sido más verosímil su campaña.