Sucedió en Colonia Santa Rosa, Salta, donde se sospecha que hay transmisión comunitaria del virus.

Grande fue la sorpresa de los pitufos de la Comisaría 23 de Colonia Santa Rosa cuando respondieron a una llamada anónima, que advertía de una fiesta ilegal en el asentamiento Gauchito Gil.
Fueron y efectivamente había gente tomando mucho alcohol y sin distanciamiento social.

Los enfiestados, al ver que llegaron los patrulleros, huyeron. Los que no tenían autos y no estaban en condiciones de correr, se encerraron dentro de la casa.

Ahí fue cuando se enteraron que la joven organizadora de la fiesta clandestina se encontraba en cuarentena domiciliaria ya que su papá se encuentra internado con diagnóstico positivo de coronavirus.

Otra de las que estaba meneando las caderas al ritmo de una cumbia de Ricky Maravilla era otra mujer que también debía estar en cuarentena en su domicilio.

Cuando los policía procedieron a la identificación de algunas personas se dieron con que una de las jóvenes que participaban de la fiesta clandestina tiene solo 13 años.