Un joven falleció ayer en Orán luego de que una gresca terminara con tres impactos de bala en su cuerpo, dos de ellos en el pecho. Mientras se desangraba ni el 911 ni la ambulancia llegaron.
Un tiro en la pierna y dos en el pecho producidos por un arma calibre 22 durante la tarde de ayer lunes en Avenida Fassio esquina Saavedra sumado a la ineficacia de los servicios del 911 terminaron con la vida de un joven de 17 años que se desangró en la vía pública ante la desesperación de los vecinos que fueron los que en última instancia socorrieron al desfalleciente herido. “Jamás llegó la ambulancia y cuando llego el patrullero constataron que hacia 10 minutos había muerto. Lo cargaron en la camioneta como a un perro y se lo llevaron”, denunció un comerciante local en Radio Cadena NOA.
Según informa este medio oranense, previo al suceso criminal la víctima y su victimario cruzaron algunas palabras y se desató una pequeña trifulca que fue subiendo de tono hasta que luego de un ida y vuelta se desató la balacera que terminaría con uno de los muchachos muerto.
Cuando el cuerpo ya había sido levantado del lugar, amigos de la víctima comenzaron a recorrer el barrio y apedrearon los domicilios de quienes consideraban cómplices del crimen, entre ellas la vivienda de un agente de policía, cuyo hijo está detenido.