El ministro de Seguridad Carlos Cayetano Oliver estuvo en la legislatura provincial para dar detalles del accionar policial en casos recientes de personas fallecidas en operativos. El funcionario defendió la formación policial y aseguró que no renunciará a su cargo.

El ministro Oliver fue citado a dar explicaciones en la legislatura, a través de un proyecto de declaración presentado por el bloque del P.O., sobre los casos recientes de violencia institucional. Entre los más resonantes y recientes está el de Cristian Ezequiel Gallardo, quien perdió la vida mientras era trasladado a una dependencia policial.

En primer lugar, el ministro justificó el ingreso de los efectivos policiales imputados en el caso Gallardo a un domicilio particular. «Dentro de las facultades que tiene la policía prevista en el código, está el que puedan actuar en flagrancia», apuntó. A su vez, remarcó que el operativo se dio en el marco de un llamado denunciando un robo.

Oliver, también defendió la formación de los policías salteños: «Hemos pasado de una formación de meses a tener institutos para oficiales y suboficiales. Nosotros también reprochamos estas situaciones y las ponemos a consideración de la justicia», subrayó.

Tras el caso de Cristian Gallardo, se conoció que el procurador General Dr. Abel Cornejo tendría en vista la intervención del Cuerpo de Investigadores Fiscales (CIF); al respecto Oliver señaló: «Son organismos que tiene que actuar por ley y hay que ser respetuosos. En ese sentido, también es respetar la autonomía de los poderes».

Por último, el funcionario aseguró que no renunciará a su cargo a menos que se lo solicite el gobernador. «Nadie me pidió la renuncia, es una facultad del gobernador, disponer y poner a los ministros del ejecutivo», resaltó.

En las inmediaciones de la legislatura se concentraron familiares y amigos de víctmas del gatillo fácil. Sandra Salas, tía de Cristian expresó en rueda de prensa: «Queremos creer en la justicia, pero tenemos fotos, audios y videos de los gritos que daba mi sobrino. Para mí, ellos lo mataron en ese furgón. Ellos lo destrozaron».