Los diarios del mundo se hicieron eco de las elecciones argentinas. Todos califican como sorpresivo el resultado y dan a Macri como favorito para la segunda vuelta. Aseguran que el kirchnerismo sufrió un duro golpe.

Sorpresa. Eso fue lo que reflejaron los diarios de distintas partes del mundo a la hora de informar sobre las elecciones presidenciales de nuestro país. Los medios coincidieron en dar como perdedor al kichnerismo y otorgarle el favoritismo a Mauricio Macri para la segunda vuelta del 22 de noviembre.

El diario El País, de España, titula “Scioli gana por poco, pero Macri es el favorito para la segunda vuelta”. “Vuelco total en las elecciones argentinas. El peronismo oficial fracasa de forma estrepitosa en su intento de ganar en primera vuelta y pierde la provincia de Buenos Aires”, agrega en el copete del artículo.

“Pese a esa victoria por la mínima, el golpe para Scioli y para el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner es durísimo. Macri se convierte ahora, por sorpresa, en el favorito para hacerse con la presidencia de Argentina, lo que supondria un giro radical después de 12 años de kirchnerismo. La victoria de Macri tendría consecuencias regionales muy importantes porque Argentina era un puntal del auge de la izquierda latinoamericana, que construyeron los Kirchner, Lula Da Silva, Hugo Cháves y Evo Morales con incorporaciones posteriores como la del ecuatoriano Rafael Correa”, completa el diario, que en su portada de este lunes se pregunta si este resultado significa el fin del kirchnerismo.

El Mercurio, de Chile, escribe: “Scioli muestra leve ventaja sobre Macri y ambos van a histórico balotaje”. “El 22 de noviembre se efectuará la inédita segunda vuelta. En Buenos Aires la opositora Vidal ‘barrió’ al oficialista Aníbal Fernández, y en Santa Cruz Máximo Kirchner afirmó que el FpV «se está renovando» al celebrar probable triunfo de su tía Alicia Kirchner”, continúa.

El periódico chileno finaliza asegurando que: “En otro de los sorpresivos resultados del ‘terremoto’ del domingo sufrido por el kirchnerismo, la candidata de Cambiemos, María Eugenia Vidal, se consolida como vencedora en la carrera por convertirse en gobernador de Buenos Aires muy por encima del oficialista Aníbal Fernández”.

El Mundo, de España, titula: “Macri frena al kirchnerismo y fuerza una histórica segunda vuelta”. “Argentina se ha inclinado por darle una oportunidad al cambio. Contra todo pronóstico, el líder conservador, Mauricio Macri, ha logrado un resultado histórico al superar el 35% de los votos y forzar una segunda vuelta en las elecciones presidenciales celebradas este domingo. Con el 80% de los votos escrutados, se registraba un sorprendente empate técnico entre el candidato oficialista, Daniel Scioli, y Macri. Ambos se verán de nuevo las caras en las urnas el 22 de noviembre para dirimir quién sucederá en la Casa Rosada a Cristina Fernández de Kirchner. Sin explicaciones coherentes, el Gobierno no ha ofrecido datos del escrutinio hasta seis horas después del cierre de los colegios electorales. A medianoche, las autoridades electorales han divulgado el primer dato, con un 67% de los votos escrutados. Y ahí se ha conocido la gran sorpresa. La coalición de Macri, Cambiemos, contaba en ese momento con el 36% de los votos frente al 34% del kirchnerista Frente para la Victoria (FpV). Scioli se ha ido recuperando conforme progresaba el escrutinio hasta llegar a un empate técnico con Macri con el 80% de los votos escrutados”, completa.

El Folha de San Pablo informa que “los datos preeliminares de la justicia electoral de Argentina divulgados en la madrugada de este lunes aseguran que habrá segunda vuelta entre el oficialista Daniel Scioli y el candidato opositor Mauricio Macri. Los números parciales indicaban que Sioli iba al frente con 36,52%, ante 34,66% de Macri. De cualquier forma, el resultado se mostraba sorprendente por el desempeño de Macri, que remontó una desventaja de casi diez puntos”.

Últimas Noticas, de Venezuela, titula “Scioli y Macri protagonizarán segunda vuelta en Argentina”: “Argentina definirá el 22 de noviembre en un inédito ballotage (segunda vuelta) si quien gobernará durante los próximos cuatro años será el oficialista Daniel Scioli o el conservador Mauricio Macri, luego de que ningún candidato obtuviera este domingo los votos suficientes para imponerse en primera vuelta. El dato sobresaliente de estas elecciones no fueron las sospechas de fraude, como algunos esperaban, sino la decisión del Gobierno, a cargo del escrutinio provisional, de comenzar a difundir los primeros resultados seis horas después de cerrados los colegios electorales y cuando ya había sido cargado el 67% de las mesas de votación”, explcia.

“A puro baile, Mauricio Macri y sus aliados celebraron en un centro de convenciones de Buenos Aires haber llegado a una segunda vuelta electoral, un escenario sin antecedentes en Argentina”, aseguró el peruano El Comercio.

El País, de Montevideo, asegura que se viene un “balotaje con sabor a derrota”. Luego relata las reacciones de los candidatos. “El primero en hablar desde su búnker en Luna Park fue el oficialista Daniel Scioli.’»A quienes antes eligieron a otro candidato yo los convoco porque creo que para un argentino no hay nada mejor que otro argentino’, llamó Scioli que se dirigió, particularmente a indecisos y a independientes. Con ello fue el primero en dejar entrever los resultados. No pasó inadvertida la ausencia masiva de los militantes de La Cámpora, usualmente de manifestaciones ruidosas, que optaron por acompañar al candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires, Aníbal Fernández. El jefe de Gabinete del gobierno de Cristina Kirchner resultó, a la postre, el gran perdedor de la jornada ante la candidata de Cambiemos, María Eugenia Vidal”.

La Vanguardia, de Barcelona, aseguró: “El oficialista Daniel Scioli disputará la presidencia argentina en una segunda vuelta contra Mauricio Macri, que en un inesperado desenlace acabó pisándole los talones en los comicios del domingo y avivando posibilidades de una victoria opositora en noviembre. Aunque se impuso en las elecciones, el peronista Scioli obtuvo el 36,6 por ciento de los votos, muy por debajo de los que necesitaba para evitar una peleada segunda vuelta e incluso menos de los que logró en las primarias abiertas de agosto.

Con más ímpetu de lo previsto, Macri, alcalde de la ciudad de Buenos Aires, logró un 34,6 por ciento de los votos, mientras que el peronista disidente Sergio Massa quedó fuera de la carrera después de obtener un 21,3 por ciento, con casi el 95 por ciento de las mesas escrutadas. ‘Lo que ya ha sucedido en el día de hoy cambia la política de este país’, dijo Macri, un líder de centroderecha, frente a sus eufóricos seguidores de la alianza Cambiemos. Miles de seguidores cantaban ‘se siente, se siente, Mauricio presidente’. Muchos saltaban con globos de colores en sus manos. ‘Esto no tiene nombre, lo esperábamos hace rato, lloro y sonrío al mismo tiempo’, dijo Sandra Lauría, una partidaria de Macri de 48 años que estaba en su sede de campaña”.

El carioca O Globo escribió: “La Argentina vivió el domingo de elección presidencial más feroz de los últimos 32 años. Desde el retorno de la democracia, en 1983, que el país no era escenario de una disputa por la presidencia en la cual ningún analista político se atrevía, después de cerrada la votación, a prever un resultado. Seis horas después comenzaron a ser divulgados los primeros números oficiales, que confirmaron que habrá por primera vez una segunda vuelta en la disputa por la presidencia del país”.

BBC Mundo aseguró que «los resultados anticipan una ajustadísima competencia entre la coalición opositora Cambiemos, liderada por el alcalde de Buenos Aires Mauricio Macri, y el Frente para la Victoria de Scioli, que no alcanzó la mayoría de votos para ganar en primera vuelta, como habían pronosticado algunos sondeos».

«El opositor Macri llegó a tener cierta ventaja sobre Scioli. La gran sorpresa de la jornada la protagonizó el bloque opositor, sobre el que ningún sondeo había pronosticado un resultado tan optimista. En cuestión de horas, los militantes de Cambiemos pasaron de celebrar el pase a segunda vuelta, a festejar eufóricos un resultado que coloca a Macri casi empatado con Scioli», completó.