Giménez y Leavy, votación desde la Legislatura salteña.

No salió bien parado el oficialismo, luego de celebradas las sesiones remotas en ambas cámaras, las que algunos representantes por Salta sostuvieron desde las oficinas de Mitre 550. En la jornada de este miércoles, el albertismo volvió a quedarse en el centro, más una leve inclinación a la derecha, ya que bloqueó el tratamiento de temas en la agenda parlamentaria cuyo refunfuñar quedó en manos de la izquierda.
La dirigenta Myriam Bregman masticó su bronca por Twitter, al detallar que “la comida a los comedores NO llega. Los magros anuncios para las empresas recuperadas NO contemplan la realidad de las mismas” y, por último que “el IFE deja un montón de gente afuera. Esa es la realidad”, concluyó la legisladora porteña.
A lo que el dirigente de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular, Juan Grabois, algo más cercano a Balcarce 50, coincidió señalando que “es cierto, Myriam”, dijo en alusión a la legisladora del FIT. El representante barrial, detalló que “lamentablemente no se ha resuelto la situación de los alimentos. Es muy grave. Ni en CABA ni en Nación”. Por esta misma vía de la red social del pajarraco, el dirigente detalló que en relación al IFE “entre los excluidos están grupos muy vulnerables como los refugiados e indocumentados”.
La dirigenta jujeña Natalia Morales, también integrante del Frente de Izquierda igual que Bregman, disparó que en esta primera sesión remota los representantes “del FdeT y macristas se opusieron a tratar el único proyecto presentado por el Frente de Izquierda de cobro de impuestos a las grandes fortunas”. La dirigenta advirtió que “el hambre y la pobreza no esperan” y remarcó que ambas fuerzas políticas “siguen eligiendo estar del otro lado”.
En verdad, el Frente de Todos tuvo un accionar parejo, tan flojo en Senadores como en Diputados de la nación. La diputada por Salta, Verónica Caliva, fue una de las pocas que asistió de manera presencial a esta reunión parlamentaria; en tanto, los senadores nacionales Nora Giménez y Sergio Leavy aceptaron el convite del Legislativo criollo por lo que expresaron respectivos pareceres desde el edificio legislativo local.