La liberalización de importaciones de computadoras, notebooks y tablets desde marzo de 2017 provocaría la destrucción de entre 5 y 10 mil puestos de trabajo, y los precios no bajarían lo que se promete.

“Como ministro de la Producción yo no publicitaría las importaciones”, criticó ayer Ramiro Caballero, ministro de Industria de Tierra del Fuego, al titular de la cartera de Producción a nivel nacional, Francisco Cabrera. El intercambio se produjo a raíz de las repercusiones que despertó el anuncio oficial de que a partir de fines de marzo del año que viene se eliminarán los aranceles de importación para las computadoras, notebooks y tablets. El Gobierno insistió con la idea de mejorar la competitividad y aseguró que mantendrá el régimen de promoción industrial en la isla. Las cámaras empresarias calculan que están en riesgo entre 5 mil y 10 mil trabajadores que se desempeñan mayormente en el continente. El Gobierno promete ayuda económica para sólo mil despedidos.

La usual dicotomía entre la baja del precio al consumidor y la destrucción del empleo por la apertura importadora es reeditada por el equipo económico de Mauricio Macri en un contexto de recesión económica y agrega más señales negativas para el mundo del empleo, más allá del eventual efecto positivo que pueda generar en los precios.

El mayor impacto se sentirá sobre las empresas que fabrican partes para computadoras y notebooks, ubicadas por lo general en el área metropolitana de Buenos Aires, y las pymes del interior del país que trabajan en el ensamblaje de computadoras a pedido del cliente. En tablets la inserción de la producción local es marginal. La reduccción a cero del arancel del 35 por ciento desde marzo próximo da vuelta la ecuación económica.

“En función de las empresas que esperamos que entren en convocatoria y las que cerrarán, creemos que la medida impactará sobre unos 10 mil empleos entre mano de obra directa e indirecta. Quedan afectadas las grandes empresas que arman la placa mother, la memoria RAM, baterías, cables y carcazas y las pymes ensambladoras del interior. Muchas seguirán haciendo mantenimiento y distribución, pero el impacto en el empleo será muy fuerte”, dijo a este diario Carlos Simone, de la Cámara Argentina de Máquinas de Oficina, Comerciales y Afines (Camoca). “La baja de aranceles de importación para equipos informáticos suma otra mala señal para las pymes. Se ponen en riesgo más de cinco mil puestos de la cadena de valor del sector porque muchas líneas de producción van a desaparecer”, planteó Jorge Luis Cavanna, titular de Cadieel, otra cámara sectorial.

Federico Hellemeyer, presidente de Afarte, que reúne a las empresas radicadas en Tierra del Fuego, agregó que “esta medida se da en un contexto del año donde la prosperidad del segundo semestre nunca llegó, y todavía está muy resentido el consumo de productos electrónicos”. En la isla el impacto sobre el empleo será menor que en el continente. Se calcula que hay unas 500 personas comprometidas. De todos modos, el Gobierno estimó que hay un total de 1000 puestos de trabajo en juego en todo el país, muy por debajo de la alarma que enciende el sector privado. “1000 empleos ya se perdieron este año entre retiros voluntarios, jubilación anticipada y despidos”, dijo Simone.

Otro punto de discrepancia entre el relato oficial y la visión de las empresas es el impacto sobre los precios al consumidor. Producción dice que las computadoras bajarán en un 50 por ciento sus precios pero Cadieel y Afarte coincidieron en que “la rebaja en el precio al público a lo sumo será de un 20 por ciento ya que hay costos financieros, impositivos, de logística y comercialización que no se modificarán”.

Las notebooks tuvieron menos éxito en la isla porque son productos que están gravados con sólo un 10,5 por ciento de IVA. Entonces, el beneficio impositivo de desgravación que ofrece el régimen fueguino es menos atractivo que en celulares, televisores y aires acondicionados, donde está el núcleo duro del sector de la electrónica en Tierra del Fuego. Los expertos advierten que si el Gobierno abre la importación y elimina aranceles en esos rubros, barrerá con la industria.

Fuente: Pagina 12