Macri calificó al terrorismo de Estado como “guerra sucia”. En una entrevista con un sitio estadounidense, puso en duda la cifra de desaparecidos por la última dictadura militar: “No tengo idea si son 9 mil o 30 mil”.
Durante una entrevista con el sitio estadounidense BuzzFeed, el jefe de Estado afirmó que la cantidad de desaparecidos durante la última dictadura cívico militar argentina «no es un debate en el que voy a entrar» y confesó que no sabe cuántos son, «si son los que están anotados en un muro (en alusión al momumento de la Costanera) o si son mucho más. Es una discusión que no tiene sentido».
Además, se refirió al terrorismo de Estado como una «guerra sucia» y remarcó que «la mayor prioridad» del Gobierno son los derechos humanos del siglo XXI.
Sostuvo también que la titular de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, «está desquiciada» y que «dice barbaridades fuera de lugar hace varios años», y la acusó de estar «involucrada en graves hechos de corrupción», a pesa de que no está imputada en ninguna causa de esa naturaleza. «En la Justicia del Siglo XXI todos tenemos que ser iguales. Se ve que ella no lo interpreta de la misma manera», opinó.
Aunque se manifestó «de acuerdo» en que se esclarezca qué pasó durante la última dictadura cívico militar, advirtió que no cree «en la forma en que se condujo el gobierno anterior (de Néstor y Cristina Kirchner), donde interfirió, presionó (a la Justicia). Esa no es la forma de disfrutar de una vida en democracia».
Por otra parte, ratificó su postura contraria a la despenalización del aborto, afirmó que le otorga “libertad de conciencia” a los legisladores de su partido en ese tema y consideró «dramática» su práctica clandestina, que espera resolver de «manera razonable».
“Sé lo que es para una mujer, ninguna bajo ninguna circunstancia quiere pasar por eso”, aseveró. Definió a «la vida» como «algo único» que «nos cambia a todos para siempre. Es lo que yo siento y no invalida que respete a otras personas que piensen diferente”.
También se refirió a la situación internacional y calificó “lo que está pasando en Venezuela» como «un desastre”. Además se mostró en contra de que el país caribeño asuma la presidencia pro témpore del Mercosur.
Por último, defendió el tarifazo en los servicios públicos y sostuvo que «lo hicimos lo más gradual que pudimos».
Fuente: Página 12