Un informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA, advierte sobre el crecimiento del consumo de drogas en barrios humildes. Aunque el conurbano bonaerense es el más afectado, el NOA da señales de alta alarma.

Nahuel Mercado Díaz, periodista de Clarín, redactó un artículo para ese medio a partir del informe difundido por el Observatorio de la Deuda Social Argentina, de la Universidad Católica Argentina.

La Encuesta de la Deuda Social Argentina, realizada por el observatorio de la UCA, se realizó en 5.680 hogares, entre 2010-2014, que perciben el tráfico de drogas de manera habitual en los barrios vulnerables pero también de los sectores medios bajos.

«El mayor crecimiento ha sido en el conurbano bonaerense tanto en magnitud como en proporción; en NOA y NEA también ha tenido un aumento importante; dos áreas de frontera de alto riesgo», afirmó Agustín Salvia, investigador jefe del ODSA. Y agregó que la franja etaria más afectada son «los jóvenes adolescentes de espacios pobres»

El estudio, dividido en cuatro apartados, señala la relación entre el crecimiento de la percepción de venta de las drogas en los barrio, el aumento del consumo en las zonas más vulnerables, con los consecuentes problemas de salud y el impacto en la vida social del sujeto «drogadito/víctima».

Así como el informe es contundente en torno al crecimiento sostenido de venta de drogas entre 2010 y 2014, que afecta principalmente a jóvenes de 14 a 25 años, también le apunta a la falta de respuesta desde el campo político. Ni siquiera el incremento de la presencia de fuerzas de seguridad en zonas marginales a servido para combatir esta problemática, aunque aseguran que funciona como un fuerte «inhibidor» del narcotráfico.

Desde la casa de estudios no dudaron de calificar la problemática como una «pandemia», en «un país de consumo, producción y tránsito».