El presidente no sabe cómo repuntar su imagen y prepara una maniobra que dejará mal parados a los jefes comunales.

Parece que el presidente Mauricio Macri evaluó dos opciones: a) no seguir con los impuestazos o b) seguir pero sacando de las boletas de luz y agua algunos impuestos municipales, que los intendentes igual deberán cobrar, pero por aparte.
Macri eligió la segunda opción, porque cree que así la gente sentirá que los servicios subieron menos, aunque todos deberán pagar lo mismo.
Ayer el mandatario mandó una serie de tuits que parecen anticipar uno de los temas que abordará en la cadena nacional que dará el viernes.
“Son muchas las cooperativas eléctricas que le suman a las boletas de electricidad gastos que no corresponden al consumo de los usuarios. La lista de agregados es escandalosa y va desde las tasas municipales, la televisión digital o los postes, hasta sepelios o el pavimento”, escribió Macri y continuó: “este abuso injustificable puede elevar el monto a pagar de la boleta de luz más de un 50% y en algunos casos hasta más de 80%. Los municipios hacen estos agregados para forzar a los usuarios a pagar y esconder o confundir sus propios gastos, ocultándolos en la boleta de luz”.
Y en el último tuit escribió: “Vamos a terminar de una vez por todas con estas avivadas, apoyados en la normativa que prohíbe sumar cargos a la boleta de electricidad”.

De esta manera el gobierno nacional se lavará las manos y le pasará el fardo a los municipios. ¿Lusal se cobrará por aparte? ¿Cuánto caerá la recaudación municipal si se emite boleta aparte para alumbrado y limpieza? ¿Cuál es el costo de emitir otra boleta?
A Macri eso poco le importa; tampoco que, como ya se ha dicho, los argentinos seguirán co la misma carga tributaria, sólo que repartida en más boletas.