El ex ministro de Urtubey, Alejandro Cornejo Dandrea, en pleno contexto pandémico, impulsa un proyecto inmobiliario de gran envergadura en San Lorenzo. Las discusiones sobre si se trata de un lugar a proteger, las responsabilidades de la Municipalidad y la secretaría de Ambiente. AM.
San Lorenzo, desde la primera mitad de los 90 a la actualidad, se ha transformado en un paraíso para los grandes desarrolladores inmobiliarios.
Con sus paisajes únicos, ha acaparado la atención de aquellos que se encuentran en la cima de la cúspide inmobiliaria. Proyecto Norte, de los Beccar Varela, CPA SRL, de Patrón Costas, Magdalena Day, inmobiliaria Cervera y Fleming, solo para mencionar algunos, son los grandes actores en el arte de la construcción de barrios privados en la villa veraniega.
Un nuevo proyecto, de envergadura, en la zona ha despertado gran polémica días atrás. Se trata de un desarrollo inmobiliario a cargo de Alejandro Cornejo Dandrea, socio en CPA SRL, proyectado en Finca Los Maitines, que abarcará 125 hectáreas de una finca de 2300 hectáreas propiedad de la familia Patrón Costas y tendrá acceso por la ruta provincial 28, pasando el puente sobre el río San Lorenzo.
Cuestionamientos
El loteo ha despertado el rechazo de una parte de los vecinos de San Lorenzo y de otros organismos, quienes han señalado que el emprendimiento impactará de manera negativa en el ambiente.
Entre los cuestionamientos, aparece el hecho de que se estaría desmontando y por lo tanto violando la ley de Bosques. La doctora en biología y residente de San Lorenzo, Patricia Marconi, aseguró que el lugar donde se pretenden llevar a cabo es un “bosque nativo” que cumple una función esencial en diferentes ecosistemas. “Lotear la zona provocará que desaparezca el hábitat del lugar, perdemos bosque y no queremos eso”, aseguró Marconi en FM Profesional.
A esto, Cornejo Dandrea respondió que es una “confusión” ya que en el lugar hay “especies no nativas, exóticas, muchas de ellas invasivas”. La ley de Bosques da vía libre para hacer un plan de manejo forestal en las áreas pintadas de amarillo, a la vez que el artículo 20 aclara que se pueden realizar urbanizaciones con el certificado de autorización de la Secretaría de Ambiente de la Provincia.
“En la zona amarilla podés hacer aprovechamiento forestal y ganadería bajo monte, pero no se puede desmontar sin cambiar la estructura original del bosque, sacando nada más los intereses que te da el bosque”, comentó una fuente especializada, quien aclaró que todo depende del criterio técnico para determinar cuál sería el plan de manejo.
Las observaciones
Jorge Klix, secretario de Obras Públicas de San Lorenzo, comentó que el proyecto no se encuentra todavía aprobado y que tiene el certificado de la Secretaría de Ambiente pero con observaciones.
Una de las cuales es que debían hacer un plan de manejo, acorde a la Ley de Bosques, lo cual es una observación para nada menor, según comentaron especialistas. Un plan de manejo, cabe tener en cuenta, es un documento técnico que incluye relevamiento forestal y de biodiversidad, varios estudios, además de una propuesta de extracción forestal, que sea sustentable.
La Municipalidad manifiesta no tener la capacidad para realizar estudios ambientales, mientras que la Secretaria de Ambiente, a lo Poncio Pilato, se lava las culpas haciendo algunos señalamientos. “Es todo lo que podemos hacer”, dicen desde la Provincia. Y algo de razón tienen ya que Romero primero y después Urtubey permitieron esto pasando zonas de rojo a amarillo. Así se pasan la pelota de un lado a otro. Por su parte los municipios se excusan alegando que no tienen personal capacitado, aunque claro está nunca pretenden tenerlo.
Mientras, prospera un negocio dominado por la especulación con la connivencia estatal. La especulación que retuvo esas tierras por años hasta encontrar el momento justo y la vista gorda de los funcionarios públicos, quienes mediante excepciones y adecuaciones permitieron que proyectos y enclaves inmobiliarios desconectados del caos, florezcan como hongos.
