La organización Greenpeace denunció el avance de topadoras en las provincias de Chaco y Formosa a través de imágenes satelitales. Advierten que están en peligro unas 7000 hectáreas de bosque nativo.
A través de un comunicado, la ONG ambientalista mostró su preocupación por el avance de maquinaria para desmonte en estancias de Chaco y Formosa. La comparación de imágenes satelitales demuestra que en las últimas tres semanas las topadoras abrieron más de 40 kilómetros de picadas (caminos) en medio del bosque nativo para pronto avanzar con un desmonte de aproximadamente 7.000 hectáreas.
La denuncia había sido presentada tiempo atrás por la organización «Somos Monte Chaco» y pudo corroborarse a partir de minuciosos monitoreos llevados a cabo por la ONG.
“A pesar de la cuarentena, los desmontes no se detienen. Es preocupante que las topadoras avancen impunemente en una finca que debería ser un Parque Nacional. Es insólito que el gobierno de Formosa, en lugar de proteger este lugar maravilloso, permita su destrucción”, afirmó Hernán Giardini, coordinador de la campaña de Bosques de Greenpeace.
La estancia La Fidelidad es una extensa propiedad ubicada a orillas del Río Bermejo, en el noroeste de las provincias de Chaco y Formosa. Se trata de una de las zonas mejor conservadas y con más biodiversidad de la región chaqueña, donde se destaca la presencia de especies en peligro de extinción como yaguaretés, osos hormigueros, tatú carretas y tapires.
En la provincia de Chaco, 128.903 hectáreas de la finca La Fidelidad fueron convertidas en el Parque Nacional El Impenetrable, tras una intensa campaña de varias organizaciones sociales. La parte formoseña de la estancia abarca cerca de 100.000 hectáreas, pero el gobierno provincial se niega a que sea un área protegida.
“La actual crisis sanitaria, climática y de biodiversidad nos obliga a actuar en consecuencia. No podemos perder ni una hectárea más de bosques”, señaló Giardini.