Lo que hace unos meses fuera un bochornoso escándalo para el gobierno hoy se convierte en la constatación de los buenos negociados con en el poder. Lomas de Medeiros ya no es el barrio que era, convertido en un cuasi country con ampliaciones de 2 y 3 pisos ya no puede reconocerse el barrio para clase media acomodada que alguna vez fue.
La nota fue publicada por el Tribuno y en ella rescatan las cifras y costos aproximados para realizar refacciones en esta barriada “popular”, no tanto por sus habitantes, sino por el nivel de notoriedad que cobró este año luego de las adjudicaciones a dedo que permitieron vislumbrar una maquinaria del acomodo, con los amigos y familiares del poder, bien aceitada y funcionando hace bastante.
De las 76 casas de Lomas de Medeiros se entregaron a fines de abril la mayoría ha sido intervenida al punto de modificarlas hasta que no se reconozcan las construcciones originales. Según los investigadores del Tribuno construir cada metro cuadrado actualmente cuesta más de 5.000 pesos
Hacer la medianera que necesitan las residencias puede salir alrededor de 50 mil pesos. Otros tipos de ampliaciones tienen costos similares. Hacer una habitación, por ejemplo, puede valer más de 50.000 pesos y agrandar una cocina unos 55.000. Para recibir las casas, había que aportar un capital de 75.000 pesos y luego cuotas mensuales de 2.800 pesos durante 20 años. En total, unos 747.000 pesos.
Además es sabido que la normativa actual no requiere autorización ni establece plazo para hacer modificaciones a las viviendas.
Valeria Guardo, tesorera de Tupac Amaru en Salta, se refirió de la siguiente manera: “Queda en evidencia que si alguien pudo agregar dos pisos no tenía una necesidad habitacional. El IPV debe hacer viviendas para los que no tienen acceso al crédito, no para los que pueden construir por su cuenta, pero les sale más barato recurrir al Estado”.
Recordemos que hace no mucho tiempo los miembros de esta organización tuvieron que soportar los palos de la policía cuando fueron a protestas a las puertas del instituto provincial de la vivienda. “Todos saben que el IPV es la inmobiliaria más grande de Salta y que no le dan la construcción de las viviendas a las cooperativas como Tupac porque se les acaba el negociado. Ellos saben que hacemos dos casas con la plata que ellos usan para hacer solamente una”.
Para finalizar: “El IPV tiene que hacer viviendas para los que no tienen acceso al crédito, no para los que les sale más barato que hacerlo por su cuenta. Es gente que no necesitaba una vivienda. Lomas de Medeiro fue un acomodo del Gobierno, para gente con ingresos superiores a los $15.000. Ese fue el primer error. Es directamente un barrio privado, porque les dieron casas a gente que tenía acceso a créditos de hasta $75.000. El barrio ya está hecho y entregado. Pero se lo dieron a gente que no le hacía falta y que tenía poder adquisitivo, mientras en la provincia de Salta hay 60 mil familias con problemas habitacionales, que no tienen donde vivir. Hay gente anotada en el IPV hace más de 20 años. Yo estoy anotada desde 2004 años y nunca me tocó un sorteo. Lo más doloroso es que no piensen primero en los que menos tienen”, dijo Guardo.
lomas del cholaje