Una anciana esperó más de 48 horas por un traumatólogo en la clínica Cruz Azul. Denuncian las esperas prolongadas que padecen los abuelos para ser atendidos.

En algunos casos, según denuncian, los ancianos están ahí hasta 48 horas, esperando que algún médico los examine.

Los familiares de los enfermos también denunciaron las malas condiciones higiénicas en las que se encuentran los pacientes.

“Mi mamá estuvo 48 horas sin ser revisada por ningún médico”, dijo a El Tribuno José Vicente Carrizo, hijo de Eva Jacinta Catalá, la mujer de 73 años que llegó a esa clínica derivada por el PAMI.

No es un caso aislado. Fortunata Cardozo de Battaglia (93 años), que comparte la habitación con la señora Catalá, también lleva más de 72 horas sin que un traumatólogo la revise o le dé alguna respuesta.