Desde la mesa chica de la gestión Sáenz, a cargo del Ejecutivo provincial, confiaron que su homóloga capitalina tenga en cuenta el acuerdo con la intendenta Bettina Romero para mantener puestos de trabajo en el ámbito municipal. Un dirigente cercano al Gobernador de la Provincia se remitió este jueves a lo convenido entre ambos dirigentes 45 días atrás, a fin de ceñirse en cuanto al mantenimiento de fuentes de empleo.
La inquietud surgió cuando este martes, muchos de los empleados contratados acudieron a cobrar sus haberes y se dieron con la sorpresa que éstos no se habían depositado. Frente a las numerosas consultas, algunas reflejadas en varias notas que publicó en las últimas horas “Cuarto Poder” (ver notas “Una preocupación persistente: https://cuartopodersalta.com.ar/una-preocupacion-persistente/ ; o también “Año nuevo y mañas viejas”: https://cuartopodersalta.com.ar/ano-nuevo-y-manas-viejas/) hubo un mensaje en tal sentido que fue reflotado este jueves, a última hora.

La palabra empeñada

La comunicación a los damnificados reflotó este pacto entre Sáenz y Bettina Romero, por el cual garantizaba “la continuidad laboral de todos ustedes”. El mensaje hizo alusión al cónclave en el cual Sáenz, Romero, Daniel Nallar (Intendencia) y Nicolás Demitrópulos (Gobernación) los actuales moradores del Ejecutivo capitalino recibieron “un listado con los nombres y remuneraciones correspondientes”.
Desde el saenzismo, no sin una cuota de escepticismo, especificaron aquella confianza en lo hablado en dicha ocasión, tras suponer que “éramos del mismo equipo” como igualmente el trabajo conjunto por un mismo proyecto político. De manera similar, el mensaje a los empleados detalló que el romerismo se había comprometido, durante un encuentro con los encargados electorales de escuelas –lo que sucedió en el Teatro Municipal- la mencionada “continuidad laboral”.

Para más datos

El comunicado a los enrolados en Planta Política, por otro lado, distinguió que en el umbral de fin de año y el comienzo de 2020, un gran número de trabajadores “se dio con la triste noticia que sus sueldos no fueron depositados”. Por lo cual, concluyeron que aquel compromiso “no fue cumplido”, en contraste con un mensaje de Nallar al Gobernador Sáenz ratificando lo prometido.
Ante dicha tardanza, el comunicado del saenzismo se refirió a “un manoseo” con los empleados al que repudió y encuadró como algo posiblemente esperable “si hubiese asumido (la Intendencia capitalina) alguien de la oposición”. Y se remitió al apoyo que Bettina Romero contó para llegar hasta el puesto actual en el Centro Cívico Municipal, de la mano del saenzismo. Hay olor a lanzas rotas en diferentes ámbitos del poder salteño.