Bajo la consigna “Las Malvinas son argentinas, Lago Escondido también”.
El dirigente del Frente Patria Grande encabeza una protesta en la estancia que tiene el empresario británico Joe Lewis en la vera de Lago Escondido, en Río Negro.
Ayer, el dirigente social y una delegación de militantes – entre ellos, el diputado nacional Federico Fagioli– ingresaron sin autorización a la propiedad e iniciaron un campamento en señal de protesta para se garantice el acceso al espejo de agua, con la consigna “Las Malvinas son argentinas, Lago Escondido también”.
Cuando los activistas llegaron a los alrededores de la finca, hubo escenas de tensión con los trabajadores de la estancia, que formaron un cordón de seguridad para intentar impedir el ingreso de los militantes. Grabois se cruzó con varios empleados.
Anoche, el grupo había anunciado que se quedaría en el lugar por tiempo indeterminado. Buscan que el gobierno nacional y el de Río Negro abran una vía de negociación para que el dueño de la estancia se compromenta a cumplir “con la sentencia judicial que obliga a abrir el camino hacia el lago”.
Existe un litigio legal en torno al acceso al Lago Escondido. El último fallo de la justicia de Río Negro obliga al gobierno provincial a abrir el camino de Tacuifi de 19,5km, que según el Frente Patria Grande, está “cerrado por Lewis con cámaras de vigilancia y el sendero de montaña”. El plazo se cumplió el 16 de diciembre pasado.