Javier Saavedra, uno de los recientes detenidos por el crimen de Jimena Salas afrontaría una nueva causa por tentativa de homicidio. Con su maniobra se estima quiso provocar un accidente.

El joven que se desempeña en la parroquia de Santa Victoria Este fue detenido el martes y mientras era trasladado desde Tartagal a Salta a la altura de Güemes quiso ahocar al conductor del móvil y con ello se cree intentó provocar un accidente, puesto que enfrente se encontraba un camión.

El chófer tiene lesiones de ataque tales como rasguños. Pese al incidente, pudieron llegar a Salta capital para cumplir con la orden judicial y el joven quedó a disposición de la jueza Ada Zunino.

Fue el juez de Garantías 1 de Tartagal, Nelso Aramayo, quien controló la legalidad de la  detención y ordenó su traslado con una comisión policial a la ciudad de Salta.