La línea de largada de la campaña a Gobernador se cruzó este fin de semana y las apreciaciones iniciales dejaron conclusiones dubitativas. Cuesta ubicar la senda que recorrerá cada campaña, tanto de uno y otros sectores. Eso, sí, se dio un comienzo con envíos que intentan enfatizar o plantar elementos desventajosos en algunos adversarios. Aunque en el primer trayecto de la actividad proselitista aún no se percibe el planteo estratégico, lo que no es menor. Por: Federico Pérez.
Dos de las coaliciones que se autoperciben a modo de principales en la lucha política por la Gobernación se asumen como destinatarias de piezas de campaña negativa, en la primera semana de septiembre. Cuando queda menos de un mes para los comicios, el Frente de Todos y el que lleva a Gustavo Sáenz como precandidato se suponen destinatarios de esta publicidad adversa proveniente de sendos comandos de campaña.
Desde un punto de vista equidistante, los espectadores conjeturan que habrá algo más complejo detrás del armado de propuestas, caso contrario los debates por la sucesión de Juan Manuel Urtubey se encontrarían en problemas. Es que en un diseño estratégico, los mensajes negativos pueden ser una herramienta, pero sin el primero que los contenga terminarían siendo apenas un artefacto.
El desafío de ir a una elección sin una planificación estratégica o hacerlo con una, puede equivaler a vislumbrar la diferencia entre un choque Bayern Münich-Barcelona y un picado de Solteros versus Casados. Hasta los días que corren, tanto el sector que impulsa las candidaturas de Sergio Leavy-Emiliano Estrada y el que sostiene al binomio Gustavo Sáenz-Antonio Marocco, no consiguieron develar esta incógnita que suele quedar en claro desde el primer momento.
En tanto, los espacios que izaron las candidaturas de Alfredo Olmedo y Miguel Isa, al menos alcanzaron a delinear algunos planteos con buen punch inicial, hasta tanto van posicionándose entre la ciudadanía. Y la tríada de precandidatos del Frente de Izquierda dieron por sentada su inclusión en la senda del cambio, respecto a los 12 años de gobierno U, sin embargo concentraron esta primera parte del doble tramo electoral en la disputa por el timón institucional.
Por su parte, el Frente Grande optó por mantener su coherencia en cuanto a su negativa por los entramados que consideró poco ortodoxos, debido al armado del FdeT en las PASO nacionales, y presentó listados propios. Con pocos recursos, aunque bastante ingenio en la difusión por vías digitales, el espacio que lleva como precandidata a Gobernadora a la dirigenta Elia Fernández es otro que se identifica con el binomio FF.
Tirando el achique
Desde el punto de vista del FdeT, deberá adoptarse una determinación para reducir el espectro en el armado del “mapa” con el que se confecciona todo diseño de estrategia. Es que, mirado el escenario desde este sector, la apariencia da como si hubiese 9 actores en la competencia, en lugar de los 8 anotados en el Tribunal Electoral provincial. El noveno sería el propio Emiliano Estrada, a juzgar por las apariciones públicas del precandidato a Vice que acompaña (¿?) a Sergio Leavy.
Tal parece que el compañero de fórmula del tartagalense, aún no encontró su centro de gravitación en el diseño global. De manera tal, generó confusión su argumentación respecto a los fondos provinciales invertidos en Fondos Comunes de Inversión, como si aún fuese el titular del Ministerio de Economía. O bien, sus planteos en solitario alusivos a la propuesta de crear una banca social que asista, financieramente, a microemprendedores.
Por lo demás, falta accionar de manera conjunta y con visión a mediano plazo por la senda de este sector, más que un cabildeo en medios amigos para conseguir un sillón en la mesa chica. Una presunción extendida en el espacio del FdeT es aguardar al próximo 20 de septiembre, cuando la llegada de CFK al Centro de Convenciones de Limache logre unificar las divergencias, luego de la mano en alto junto a Sergio Leavy.
En contraste, el Frente Sáenz Gobernador se verá en la necesidad de poner en juego ante el electorado algo más que las visitas cortas de su postulante al Ejecutivo provincial, a puro beso, baile y cánticos. A esto, además el fin de semana anterior, cuando visitó la localidad anteña de Las Lajitas, le adicionó sorteos de tortas y una heladera. Sin emitir juicios valorativos sobre estos artilugios, eso lo emparenta al recorrido por el interior que hace habitualmente Alfredo Olmedo ¿Será conveniente copiarse de un eventual competidor por una franja similar del electorado?
Al igual que Leavy, por lo demás, Sáenz tendrá su momento exultante durante el próximo festejo católico, en honor a la Virgen y Señor del Milagro. Un evento tradicional, oficial y en el que los silencios suelen ser bien retribuidos por cientos de miles de salteños. La macana es que el efecto no dura, ni permanece anclado -por sí solo- hasta el momento de votar. Lo mismo que los balas de salva que, por vía digital, sus buzos tácticos develaron el alto poder de fuego del que disponen. Pero también su bajo grado de efectividad, exceptuando el susto momentáneo que esto suele generar entre los desprevenidos.
Reclamo de herencia
Desde su particular manera de confrontar y proponer temas, Alfredo Olmedo planteó que los recursos generados por la economía salteña deben generar un beneficio equivalente para sus habitantes, sino no tienen razón de ser si continúan siendo aprovechados por la región portuaria y el Centro del país. Una suerte de debate retro, vuelta de tuerca hasta la década del 80 cuando el primer romerismo le hizo un planteo similar al gobierno de Raul Alfonsín.
No es lo único de esta factoría de ideas que se sacó del arcón. Pues, si alguien se auto atribuye legitimidad para plantear ante los estrados jurisdiccionales un reclamo por la herencia de “don Roberto”, ése es Miguel Angel Isa. Y en tal dirección fue, quien compite en la interna del FdeT contra Sergio Leavy, al proponer la creación de unos 20.000 empleos que rescaten de la miseria a sus comprovincianos. Los memoriosos de la ciencia política recordaron que un acápite muy parecido había utilizado Unidad & Renovación, durante la interna con Carlos Caro en 1983.
El contraste con esto lo marcará la campaña del Frente Grande, ya que apelará principalmente al menor costo de mensajes en redes sociales para promover a Elia Fernández como precandidata a la Gobernación. Sin dudas, la pericia de sus cuadros tecnológicos pondrá a prueba al FG para intentar rascar algunos votos fugitivos del kirchnerismo y el albertismo nacional.
Para el final, dejamos al Frente de Izquierda, el cual será de los trabajadores pero se encuentra bastante lejos de la Unidad. El 6 de octubre próximo irá a primarias, en las que tres precandidatos a gobernadores se medirán para definir las listas hacia el 10 de noviembre, como también en cuanto al manejo de la palanca del FIT. Andrea Villegas y Violeta Gil se pondrán a la búsqueda de un voto vanguardista, el cual intentará desmontar la conducción tradicional que está resumida detrás de la postulación de Pablo López.