A un año del femicidio de Agustina Nieto familiares y amigxs realizarán una marcha exigiendo justicia. Denuncian inconsistencias en la investigación por parte del CIF y la policía y la posible participación de efectivos de la fuerza salteña.

Mañana familiares y amigxs de Agustina (21) encontrada asesinada en el barrio San Benito el 10 de noviembre de 2018 luego de permanecer horas desaparecida, realizarán una marcha para exigir justicia por la joven madre. A un año de su femicidio denunciaron que la investigación posee serias inconsistencias en la búsqueda de saber quién o quienes la asesinaron.

Por el asesinato hay un solo imputado que hoy goza de libertad condicional, Joaquín Octavio Viñabal  que además cuenta con un abogado privado. Desde el entorno de la joven señalaron que han surgido testigos y versiones que vinculan a un miembro de la policía salteña, y a terceros, como los femicidas de ella.

“El caso de Agustina Nieto posee varias aristas importantes que deben ser analizadas: su cuerpo fue hallado en un aguantadero en barrio San Benito el día 10 de Noviembre, y las irregularidades por parte del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) se produjeron desde la primera hora: en un primer momento, se le informó a la familia directa de la víctima que era imposible determinar si la misma había sufrido o no violación, bajo la excusa de que ‘a causa del excesivo calor en aquella fecha, el cadáver se había descompuesto a una velocidad anormal; en consecuencia, la probable violencia sexual que ella podría haber sufrido, no podía ser constatada’ –lo cual resulta científicamente imposible, ya que el cuerpo no estuvo ni 24 horas en la escena del crimen–. Sin embargo, la ropa (el top) que traía Agustina, fue arrancada, lo que constituye un claro indicio de que sufrió algún tipo de agresión sexual”, describieron.

Además señalaron que la joven poseía quemaduras en su piel: “alguien intentó quemar su cuerpo completo posterior al hecho, o fue torturada de esa manera antes de que el asesinato se concretara”, denunciaron y aseguraron que el asesinato no fue perpetuado por una sola persona:

“Nos preguntamos si la ineptitud de la Policía, el CIF y los fiscales es adrede, intencional. En el caso específico de Agustina, han surgido testigos y versiones que vinculan a un miembro de la policía salteña, y a terceros, como los femicidas de ella. Si bien aún no hay evidencias claves que sirvan de sustento al respecto, existe una serie de hechos que le aportan peso a estas versiones: primero, el accionar negligente realizado en los peritajes iniciales; segundo, el único imputado en la causa, Joaquín Octavio Viñabal (quien goza actualmente de libertad condicional), cuenta con un abogado privado al cual, para financiarlo, precisaría de un monto de dinero importante (monto que Viñabal no posee, puesto que es una persona carente de recursos); tercero, la causa cuenta con un sólo expediente –lo que según abogados experimentados en éste tipo de casos, significa una investigación pobre por parte de la Fiscalía, ya que las causas de ésta índole suelen contar con un número mayor de documentos de esta clase específica: se habla, al menos, de 4 expedientes en casos con estas características”–.