En la causa de las facturas truchas cohabitan rarezas, ocultamientos y anomalías por doquier. Martín Grande embarra la cancha, mientras desplazan al jefe de la AFIP. Se suma otra denuncia, y la decisión sobre la libertad de Matías Huergo se prorroga. Al empresario, se lo acusa de “asociación ilícita”, pero curiosamente no hay mas imputados, ni detenidos. Dudoso desempeño del fiscal federal, mientras el juez hace silencio de Bavio.

Por A. Bogado

En la causa de las “facturas truchas” – como se la conoce vulgarmente- cohabitan rarezas, ocultamientos y anomalías por doquier. El reciente desplazamiento del Jefe Regional de la A.F.I.P. Guillermo Oro, terminó agregando más dudas que certezas. Para los de memoria frágil, conviene hacer un repaso: Dicen -a nadie le consta- que la causa se inició hace dieciséis meses. Nadie estaba al tanto hasta que en el mes de enero -en un operativo parecido a la serie Narcos de Netflix- la justicia federal allanó en forma espectacular, las oficinas de la Secretaría de Hacienda municipal. Todo indicaba que se venía una cadena de detenciones, entre los que figuraba como numero puesto el ex mandamás de las finanzas municipales  Pablo Gauffin. Pero como ésta no fue la excepción, a las causas instruidas por el fiscal federal Ricardo Toranzos, el grandilocuente operativo pronto quedó en la nebulosa. 

  Toranzos atesora un llamativo récord, hace veintitrés años que se desempeña como fiscal federal y jamás inició una causa de oficio es decir, por su propia iniciativa. Y mire que ¡han pasado cosas en Salta, dignas de su atención! Pero resulta que luego de un prolongado silencio de radio que duró de enero a mayo, ordenan la detención del empresario Matías Huergo, quien en el acto mutó de tener un millón de amigos como Roberto Carlos, a quedar más solo que Sergio Massa o Javier David en el Día de la Lealtad. Además, parece que al juez Julio Bavio las brasas no le son de su agrado, ya que inmediatamente intentó arrojarlas para el lado de la justicia provincial, aunque le rebotaron como pelota de frontón. La fiscal María Eugenia Guzmán lo sacó como caja destemplada y le dijo que debía profundizar la investigación. Silencio de radio. Perdón, silencio de Bavio. Aunque de radio también.

 A todo este sainete criollo, se sumó el diputado macrista Martín Grande quien, medialunas mediante, se presentó a la Delegación Salta de la Policía Federal para retar a su amigo Huergo, delante de un celador. El pregonero de la moral salteña, que padece una diagnosticada pero no tratada diarrea verbal, declaró que Huergo era el salame de un “sanguchote”. Cable reflexionar, que el empresario Huergo pueda ser salame, es una posibilidad incierta; pero de que corre peligro, es una posibilidad cierta. Sucede que el verborrágico diputado nacional omitió contar quiénes vendrían a ser el “sanguchote”. Y eta es la pregunta del millón para todos, salvo para el fiscal Toranzos que parece que no se encuentra entre sus preferencias, ni el salame ni el “sanguchote”. Fue así como se suma un nuevo actor, el concejal de Memoria y Movilización Luis López, quien denunció penalmente a Grande por no decir entre medio de qué sanguchote estaba el salame (o sea Huergo). Silencio de radio. Perdón, de Bavio.  

Como es por todos conocidas la fama de Grande, en él no figuran ni la lealtad, ni la discreción, y por eso salió a burlarse en redes sociales del abogado del “salame”, cargando en forma brutal contra Sebastián Espeche -quien a su vez no parece muy enojado con la actuación del juez Bavio, ni del fiscal Toranzos- que, al compás del tango Fumando Espero transita sin prisa la etapa en la que su cliente sigue preso en La Federal. 

Pero parece que todo lo que brilla no es “Oro”, y sería por eso que el funcionario del la AFIP fue la primera cabeza que rodó ante el escándalo nacional en el que llamativamente, se acusa al único detenido por “asociación” ilícita calificada, sin que a nadie más se lo involucre ni se lo impute en la causa (Plop!). Toranzos de lo que si  se ocupó, fue de permitir que los reporteros gráficos saquen fotos al detenido Huergo en todas las poses posibles, pero cuando los periodistas intentaron retratar a los otros supuestos involucrados en la causa, el fiscal los echó como a perros. Y todo volvió a silencio de radio. Perdón de Bavio.

Hablando de silencio, pareciera ser la misma modalidad que se apoderó de la causa donde estaban imputados el ex Jefe Regional de la A.F.I.P. Rafael Bresnick Renner y el abogado Nicolás Fili. Parece que mucha gente de la justicia federal o bien llamada “injusticia huele mal”, les debían muchos favores a Renner y Fili. Y como siempre, lo que Toranzos toca, se esfuma como la lámpara de Aladino, pero a la inversa. 

Cabe analizar a estas alturas, que si lo de las “facturas truchas” tuviese asidero, las consecuencias políticas y judiciales que podría tener la causa son inimaginables. Lo extraño, es que sólo Huergo está en cana y allí paró todo. En todo esto, el dudoso desempeño del juez y el fiscal federal están mas que probados. Y si en todo caso, se tratara de una operación política para perjudicar a “alguien”, cobra mayor gravedad, y habría que rotar detenciones: Huergo para afuera y los silenciosos a La Federal. Otra! Cuando le preguntan por la causa al “Mono” Pérez Alsina opta por reírse, de una forma en la que no se entiende si lo hace porque el tema lo pone nervioso, si se trae algo entre manos, o es colaboracionista del silencio de radio. O de Bavio.

Sin decisión sobre la detención de Huergo

Lo que se esperaba como un día clave el del pasado viernes
en la causa que involucra al empresario Matías Huergo,
imputado por asociación ilícita y fraude al Estado finalmente
quedó en la nada.
Es que la Cámara Federal de Apelaciones decidió aplazar la
decisión frente al pedido del abogado del empresario,
Sebastián Espeche, quien había apelado tanto la resolución de
detención del juez de primera instancia Leonardo Bavio, como
la resolución que denegó la excarcelación. Otras de las
posibilidades que barajaba la defensa de Huergo era la
detención domiciliaria.
El letrado fundamentó que el argumento de entorpecimiento de
la investigación esgrimido para denegarle la libertad, quedaba
perimido al ya no existir materiales pendientes de investigación,
la cual se encontraba concluida. Sin embargo, una nueva
denuncia hizo posponer la decisión.
La nueva denuncia, fue realizada por el abogado Guillermo
Alberto (perteneciente a la Comisión de Jóvenes Abogados del
Colegio) e inmediatamente fue remitida a la justicia federal,
fuero en el que se inició la investigación sobre la empresa
Arcadio. Cabe recordar que la Cámara Federal de Apelaciones
debía resolver también este viernes sobre la competencia de la justicia federal para tratar los supuestos delitos de fraude al
Estado municipal y provincial, pero suspendió la audiencia.
La inacción de los imputados en la causa, es algo que a los
avezados no deja de llamarles la atención. Por otro lado se
sabe que el clima quedó enrarizado en la AFIP, frente a la
decisión de desplazar a su titular luego de que la investigación
cobrara trascendencia nacional.
Matías Huergo se encuentra arrestado desde el pasado 13 de
mayo en el edificio de la Delegación Salta de la Policía Federal
Argentina y por el momento es el único detenido que tiene la
causa por las facturas apócrifas.