Alina Morales denunció que en la escuela le quitaron la bandera a su hija por negarse a recibir clases de religión. El caso fue tomado como testigo en la Audiencia de la Corte Suprema y aunque la ministra de Educación lo negó, la institución debe ahora realizar talleres de sensibilización. (Andrea Sztychmasjter)

“Discriminación religiosa, por ideología política familiar, e identidad de género y violencia institucional”, fue lo que denunció Alina Morales -madre de una alumna del último año de la escuela Juana Azurduy de Padilla y de otro hijo menor- sufrían por parte de profesores y autoridades ante la negativa de que sus hijos recibieran educación religiosa. Todo esto devino según señaló, en la baja paulatina de notas y la posterior quita de la bandera, aunque desde la institución exteriorizaron que ello se debía a un reglamento interno que propone la rotación de la bandera.

En abril de este año, luego del dictamen del Procurador Fiscal ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Víctor Abramovich, sobre la inconstitucionalidad de las cláusulas del artículo 27, inciso “ñ” de la Ley 7.546 de educación de Salta sobre la enseñanza religiosa, Alina Morales integrante de H.I.J.O.S -hija de Eliseo Morales, docente rural y educador popular asesinado en la dictadura militar-, denunció la situación ante el Instituto Nacional Contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI).

Según manifestó la militante, en la nota presentada ante el organismo nacional exigían que como solución la institución cese la persecución religiosa e institucional, que alguna autoridad docente se haga cargo de sus hijos en las horas de educación religiosa, se terminen las ofensas y que se deje esclarecido las pautas de calificación del alumnado.

“Yo había solicitado a la escuela que me remitan copias del reglamento interno de convivencia, del proyecto institucional, de las listas de notas altas promédiales de los dos séptimos grados y toda documentación que aclare sobre los criterios evaluativos, algo que nunca respondieron”, señaló Alina aclarando que la situación comenzó en 2016, cuando ella presentó notas para que sus hijos no recibieran educación religiosa.

“Por toda esta situación mi hija empezó también a sufrir ‘bullying’, le sacaban la mochila de su banco y se la tiraban para atrás del aula. Entonces tuve que ir y levantar un acta”, comentó y agregó que luego de hacer pública su situación, las docentes de religión fueron puestas a realizar tareas administrativas en el Ministerio de Educación.

Según relató Alina luego de su denuncia, el INADI intimó a la institución en un acuerdo conciliatorio al que llegaron las partes, a que en las horas de religión los chicos queden a cargo de las docentes del aula generando actividades por fuera de la hora de religión. Además se postuló que la comisión de Derechos Humanos del Colegio de Abogados realice talleres sobre Libertad de culto, Terrorismo de Estado e Identidad de género.

Caso testimonial

Fue la senadora del Partido Obrero, Gabriela Cerrano, quien en la Audiencia pública llevada a cabo por la Corte Suprema de Justicia mencionó algunos casos concretos de “discriminación y segregación” sufridos por niños no católicos en escuelas salteñas. “Una situación que se podrá ver en los amparos es que la mayoría de los casos son padres de niñas, porque suponen que las mujeres deben aceptar con total resignación el sometimiento o la obediencia a una religión”, manifestó.

Inmediatamente la senadora en su discurso contó el “caso Garzon”, una niña evangelista estudiante de la escuela Paula Albarracín que fue llevada al gabinete psicopedagógico porque lloraba constantemente ante el no respeto de su religión y quien según mencionó Cerrano sufría medidas disciplinatorias.

Así también la senadora obrera se refirió al caso de la hija de Alina Morales: “La alumna fue desplazada de ser abanderada por este mismo motivo y ahora le salieron con que se debe a un reglamento interno”. Al finalizar la senadora mencionó que la religión en las escuelas es un impedimento de la implementación de la ESI (Educación Sexual Integral) y que desde su organización rechazan tajantemente que la religión católica sea formadora de valores: “Consideramos que lo que forma los valores en los niños y adolescentes es el desarrollo del pensamiento crítico, luchamos por una educación laica y científica”.

“No corresponden”

En su alocución en la Audiencia ante los jueces de la corte Suprema la Ministra de Educación de la provincia, Analía Berruezo (Ver https://www.youtube.com/watch?v=sknLn_L-1Fw 1hs:20min) señaló que “la circular N 2” (año 2012) establece la prohibición de rezos durante el inicio del día educativo, y la bendición de las comidas. Algo que sin embargo aseguró sigue sucediendo en varios establecimientos, aunque aclaró que hubo un gran avance desde el amparo presentado, porque se fueron modificando las prácticas.

“Y nunca se presentó otra solicitud o demanda en relación a discriminación dentro de la hora de religión, a tal punto que aquí algunos Amicus presentaron tres o cuatro ejemplos que en realidad no corresponden a una demanda puntual. Se habló por ejemplo que en la escuela Padilla a una alumna se le quitó la bandera por no pertenecer al culto católico y en realidad era por un reglamento interno que tenía que ver con la rotación de la bandera y se buscó la forma de llegar a que sea por el culto católico y es erróneo. Se escucharon muchas presentaciones de este tipo y nosotros las tenemos para compartir con uds”, señaló la Ministra.

Sobre Derechos Humanos

Pese a que la Ministra negó la situación, Alina Morales junto a Marcelo Nieto, letrado de la comisión de Derechos Humanos del colegio de Abogados, lograron que la escuela se comprometa a realizar talleres de sensibilización y debate para todos los docentes de esa institución de ambos turnos. Los mismos fueron implementados conjuntamente con el Ministerio de educación. “En la conciliación también estuvo presente un abogado del Ministerio lo que significa que ellos también están al tanto de la situación de discriminación que sucedió porque sino no se hubiera obligado a que en la escuela se dicten estos talleres”, recordó Alina y mencionó que desde la institución le informaron que justo este año se implementó esta metodología.

El abogado Nieto comentó que los talleres fueron dictados por cuatro letrados del colegio de Abogados el 19 de agosto pasado en una jornada que duró 8 horas. “La recepción por parte de los docentes fue muy buena. Se logró reflexionar y tomar conciencia sobre Derechos Humanos y las pautas culturales y hábitos que están mal inculcados”, señaló.

Para Alina Morales esta decisión marca un precedente ya que pensando a futuro se podría implementar diversos talleres en otras instituciones educativas. “Cuando ellos firmaron no se dieron cuenta o minimizaron el alcance de lo que políticamente significa esto. Para mi es una victoria pírrica porque la bandera no se la devolvieron pero no deja de ser una victoria para el conjunto de la población”.